La garúa, el misticismo y todo el amor de un pueblo a su líder

CARACAS.—A la llovizna fina le dicen garúa por estos lares y le otorgan un significado mágico cuando cae fuera de temporada. Así fue este 5 de marzo en Caracas, dos años después de la muerte del líder bolivariano, Hugo Chávez.

La jornada de homenajes finalizó en el lugar “donde comenzó todo”, en el Cuartel de la Montaña, lugar de reposo de los restos del líder boliva­riano.

Hasta esa zona ubicada en la Parroquia 23 de Enero en Caracas, llegaron las principales autoridades de la nación venezolana, familiares de Chávez, invitados internacionales y una representación del pueblo, para rendirle honores al hombre que cambió la fisonomía de su país y de todo un continente.

Horas antes, ese mismo pueblo se reunió en la céntrica Plaza Bolívar para realizar una tribuna antimperialista. Allí, el presidente Nicolás Ma­duro, aseguró que el Comandante Chávez fue “el más grande líder que ha tenido Venezuela después del Libertador Simón Bolívar”.

“Solo los valientes construyen pueblos, por eso esta jornada es para recordar a Chávez”, comentó el mandatario quien rememoró momentos de sus encuentros con el líder, así co­mo las enseñanzas aprendidas.

Chávez sacrificó su vida por los humildes y “nos forjó en los valores del sacrificio, de dar nuestra vida to­dos los días por el pueblo”, dijo Ma­du­ro para luego agradecer el apoyo recibido por el pueblo para enfrentar los ataques permanentes contra el país.

En ese mismo espacio aseguró que la mayoría de los venezolanos jamás abandonó a su líder, quien “cons­truyó una nueva visión del antimperialismo bolivariano, unitario, liberador y humanista. Seremos leales con este proyecto de historia y de Patria”, reiteró.

En el homenaje participó también la diputada cubana y directora del Centro Nacional de Educación Se­xual, Mariela Castro; el destacado ensayista e historiador venezolano, Luis Britto y la excandidata presidencial hondureña, Xiomara Castro, en­tre otras personalidades.

“Seguimos intentando hacer una Patria libre, soñando por la justicia y la equidad social y para que nunca se pierda la solidaridad humana”, señaló este jueves Mariela Castro al intervenir en la tribuna antimperialista.

La diputada cubana alzó su voz para ratificar la incondicional amistad entre ambos pueblos y expresó toda la solidaridad con la nación sudamericana.

“Venimos a rendir tributo a Bolí­var y al Comandante eterno Hugo Chá­vez, a su pueblo que nos sigue acompañando, al presidente Madu­ro, y a los nuevos líderes que llevan adelante esta gran epopeya latinoamericana”, aseguró la diputada cubana frente a las miles de personas que se congregaron en la plaza caraqueña.

Otro momento especial fue el en­cendido de la cruz del Waraira Re­pano, la montaña que bordea a Cara­cas por el norte. Aunque ello solo su­cede en diciembre, esta vez ilumina la ciudad amada por Chávez en mágico homenaje, como la garúa que cayó este día excepcionalmente.