ÓRGANO OFICIAL DEL COMITÉ CENTRAL DEL PARTIDO COMUNISTA DE CUBA
El primer ministro griego Tsipras no ha cedido en su demanda de renegociar la deuda de su país ante la Unión Europea. Foto: www.heraldo.es

La Unión Europea (los grandes bancos, sobre todo alemanes) están empeñados en que los griegos paguen una deuda de 240 000 millones de dólares que los gobiernos anteriores contrajeron después de dejarse manipular por la financiera norteamericana Lehman Brothers, que luego fue absorbida por la supercorporación Goldman Sachs en una maniobra que inspira ciertas sospechas.

El nuevo primer ministro heleno, Alexis Tsipras, dirigente del partido de izquierda Syriza, ha tratado de convencer a sus pares de la Unión Europea de la necesidad de renegociar la deuda debido a que es prácticamente impagable, pero ha chocado con grandes barreras, sobre todo en los gobiernos de Alemania, Francia y España, absolutamente intransigentes en su demanda de que Atenas aplique las medidas económicas que le impusieron para recibir un préstamo destinado a salvar a los bancos, cuyos mayores acreedores, según la prensa, son sobre todo germanos.

En la última reunión de gobernantes de la Unión en Bruselas, Tsipras tampoco alcanzó avances en la comprensión de un problema que están pagando los ciudadanos griegos con desempleo, desahucios y suicidios y, según el diario El País, del poderosísimo grupo PRISA y cuyas informaciones y comentarios tienen siempre un sutil filo antihelénico, hubo una batalla de silencio entre los gobernantes de Grecia y España.

Tsipras y su gobierno se han mantenido hasta ahora en sus trece y exigen la renegociación de la deuda con una quita considerable, porque no la pueden abonar salvo al precio de hundir al pueblo balcánico en una noche de hambre y necesidades perentorias, de la cual será difícil librarse si Atenas admite las durísimas condiciones de la Unión Europea.

Maniano Rajoy, jefe del Gobierno español, fue uno de los más insistentes en que Grecia tiene que pagar la deuda. Él y Tsipras ni siquiera se saludaron en los pasillos. Madrid apoyó las medidas draconianas del entonces primer ministro heleno, Antoni Samaras, pero no ayudó mucho, pues unos días después Syriza, con su plan de aumentar el salario mínimo y las pensiones y no continuar con el plan ultraneoliberal de los financieros europeos, ganó las elecciones parlamentarias que dieron el gobierno a Tsipras.

Una operación de salvamento de bancos fue definida por España como que "…La Unión Europea ha sido solidaria, y mucho, con Grecia”. Por supuesto, en esa declaración no se explica por qué son tan testarudos los griegos al lanzarse por miles a las calles en franca exigencia de que se cumplan las promesas de la campaña electoral de Syriza y no continúen sumiéndolos en más pobreza como buscan las grandes corporaciones representadas en el Fondo Monetario Internacional, el Banco Central Europeo y la Comisión Europea (la famosa troika).

El problema de la Unión Europea y Estados Unidos es que un gobierno de izquierda, ejerciendo la soberanía de su país, tendría en el llamado Viejo Mundo consecuencias parecidas a la ola popular latinoamericana, donde la soberanía y la dignidad se colocan sobre las presiones extranjeras.

De todas formas, el Gobierno de Atenas continúa defendiendo la necesidad de recibir una quita en su deuda pública. Según el ministro de Finazas, Yanis Varoufakis, su nación nunca podrá cumplir sus actuales compromisos sin un nuevo acuerdo sobre la deuda, calculada en el 185 % del Producto Interno Bruto griego.

Tras duras negociaciones con el Eurogrupo, el Gobierno griego afirmó que Grecia"ha pasado página", tras conseguir el 20 de febrero un acuerdo con los socios de la Eurozona para prorrogar cuatro meses el crédito concedido al país, y aseguró que lo ha hecho “sin dar marcha atrás al mandato recibido” del pueblo en las elecciones.

Según expertos, el Gobierno "ha conseguido el principal objetivo" que era ganar "tiempo" para negociar, "en el marco de un acuerdo puente de cuatro meses", un pacto más amplio.

Al referirse a la troika de acreedores internacionales Varoufakis comparó sus estrategias con las técnicas de tortura de la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos.
Cuando la CIA tortura a un hombre, poco antes de la parada cardiaca, se le permite respirar un par de veces. “Entonces se nos vuelve a empujar debajo del agua, y todo empieza nuevamente”.

Atenas pretende renegociar hasta finales de agosto un alivio financiero de la deuda, con 240.000 millones en manos de la UE y del FMI y persiste en terminar con la injerencia de la troika.    Varoufakis propone un canje de los bonos actuales por deuda ligada al crecimiento. Los socios apenas ven margen para rebajar intereses y ampliar plazos.

El nuevo primer ministro griego no sólo se va a enfrentar a los todopoderosos políticos alemanes. Alexis Tsipras también ha dado el disparo de salida a un choque de trenes con los principales magnates de la comunicación de Grecia.

En su primer discurso ante el Parlamento, el mandatario heleno aseguró que acabaría con el triangulo de intereses formado por los oligarcas, los medios de comunicación y las clientelas políticas para acabar con la nociva influencia en la población que desea ejercer la oligarquía helena.

COMENTAR
  • Mostrar respeto a los criterios en sus comentarios.

  • No ofender, ni usar frases vulgares y/o palabras obscenas.

  • Nos reservaremos el derecho de moderar aquellos comentarios que no cumplan con las reglas de uso.

Kali Rossi dijo:

1

2 de marzo de 2015

07:15:42


Alemania y/o la Troika no cederán fácilmente a no ser que Grecia haga un juego de jaque mate refugiándose literalmente en los brazos de Rusia, y obviamente abandonando el Euro. Se necesita mucho coraje para hacer esto, ¿quizás Alemania cedería solo con una amenaza? Si la Troika cede será muy sutilmente ya que España va detrás con el triunfo inminente de PODEMOS y así las cosas no están los alemanes dispuestos a "perder vacas a ordeñar". El demantelamiento del Euro es un hecho para el futuro pero los bancos están interesados en que esto ocurra cuanto más tarde mejor. Nos han metido en un callejón sin salida donde los perdedores somos primero el pueblo pero los opresores también viven sus últimas etapas. Saludos amigos de Cuba!