Si el quinteto varonil Capitalinos es apodado el tren azul del baloncesto, por su paso arrollador de 18 triunfos sin reveses a uno de quebrar el récord en poder de Ciego de Ávila, la versión femenina de Pinar del Río era un tsunami, justo hasta que sus homólogas citadinas las detuvieron en el partido 54, al quebrarles el invicto por 75-57.
Esa —54 sonrisas— fue la cadena de victorias eslabonada por las pinareñas en etapa regular de la Liga Superior, después de fracasar ante Sancti Spíritus en la temporada 2013.
Ahora las alumnas del debutante mentor capitalino Ernesto Wright apostaron a los contragolpes y el juego interior como argumentos de triunfo, expresados en lo individual por Zuleira Atiez (26 puntos), Suchitel Ávila (18) y Clavdia Calvo (16).
Sobre el éxito Wright acuñó: “Nos dimos cuenta de que no funcionó nuestro marcaje personal. Pinar posee jugadoras rápidas y versátiles y dependimos de la zona abierta como principal variante defensiva. Otra clave fue la transición efectiva al contraataque, les dimos de su misma medicina. Esta selección, al igual que el masculino, centra su rendimiento en su defensa y condición física de sus jugadoras. Ahora la mentalidad es avanzar, ganar cada partido que se pueda y luego pensar en la postemporada”.
Su homólogo Armando Pérez, timonel de las vueltabajeras, también opinó: “Capitalinas es superfuerte, no en balde marchan segundas con 13-5. A nosotros nos falló el perímetro, los porcentajes de tiro fueron fatales, además de que en defensa permitimos más de 70 cartones, muchos de ellos en jugadas de contragolpe”, explicó el mentor.
“Fue un choque cerrado hasta el último cuarto. Con el balance actual (17-1) prácticamente estamos clasificados, ahora resta ajustar la maquinaria pensando en los play off y en la obtención de otro cetro”, concluyó Pérez.
COMENTAR
Responder comentario