DAMASCO.— El presidente sirio, Bashar al-Assad, asumió este miércoles ante la Asamblea del Pueblo (Parlamento) un nuevo mandato constitucional, de siete años.
Tras la ceremonia de toma de posesión, Al-Assad resaltó cómo las pasadas elecciones del 3 de junio, en las cuales resultó reelecto, constituyeron una “batalla para defender la soberanía, la legitimidad, la decisión nacional y la dignidad de las personas”, reportó PL.
La masiva participación popular en esos comicios, agregó, los convirtió de hecho en un referéndum a favor de la soberanía y contra el terrorismo en todas sus formas que ha enfrentado el país durante los útlimos años.
Con sus votos, dijo Al-Assad en referencia al pueblo sirio, han derrocado a los terroristas junto a quienes los han apoyado, así como a sus amos (en referencia a las potencias occidentales que apoyan a los extremistas islámicos que actúan en Siria).
El mandatario destacó que la guerra que se está librando contra el pueblo sirio es una guerra sucia, indicó SANA.
Al referirse a los acontecimientos en el escenario regional, el presidente Al-Assad aclaró que lo que está pasando en Gaza hoy en día no se separa de la ocupación de Palestina, la invasión de Iraq o la fragmentación de Sudán, sino que forma parte de una cadena de planes elaborados por Israel y Occidente.
“Se hace ilusiones quien cree que podemos vivir con seguridad si nos distanciamos de la causa palestina”, acotó el presidente, y aseguró que la causa palestina seguirá siendo la causa principal para Siria.
En las pasadas elecciones presidenciales de junio, Al-Assad obtuvo el 88,7 % de los votos válidos.
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Francisco Valdés Medina dijo:
1
17 de julio de 2014
08:21:40
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