SAN JOSÉ.— Luis Guillermo Solís juró este jueves como nuevo presidente de Costa Rica, país que gobernará por los próximos cuatro años.
En su discurso reiteró su disposición para implementar un diálogo político con todos los sectores, así como administrar responsablemente las finanzas públicas y llevar a cabo la lucha contra la corrupción.
La ceremonia de investidura se celebró en el Estadio Nacional y participaron jefes de Estado y de Gobierno de la región, así como otros invitados internacionales.
Los 57 diputados electos para el periodo 2014-2018 y los miembros del nuevo Consejo de Gobierno Ampliado también fueron juramentados este jueves.
Solís sucede en el cargo a Laura Chinchilla, tras vencer en las elecciones de abril pasado al candidato de la organización de la saliente mandataria, Partido de Liberación Nacional, Johnny Araya. El nuevo presidente, del Partido Acción Ciudadana (PAC), obtuvo en los comicios casi el 78 % de los votos. El PLN deja así la presidencia después de 8 años en el poder.
La agencia PL precisa que el presidente número 47 de la República recibirá un legado desafiante, si se consideran el 20,7 % de pobreza prevaleciente, el alto déficit fiscal, la inconformidad ciudadana por la desigualdad galopante y en particular, la de los educadores, en pie de lucha hace varios días en todo el país por pagos pendientes.
Solís es un historiador y politólogo de 56 años que se ha desempeñado como profesor, funcionario público, en partidos políticos y en organizaciones no gubernamentales.
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