ÓRGANO OFICIAL DEL COMITÉ CENTRAL DEL PARTIDO COMUNISTA DE CUBA
Solís asumirá su cargo el próximo 8 de mayo. Foto: CRHOY

No hubo sorpresas el pasado domingo en Costa Rica. El líder del Partido Acción Ciudadana (PAC), Luis Guillermo Solís, resultó el obvio vencedor en la segunda vuelta de los comicios presidenciales más inusuales de la historia moderna del país centroamericano.

El rival de Solís —al menos en las papeletas— era Johnny Araya, del gobernante Partido Liberación Nacional (PLN), quien un mes antes había abandonado la contienda por falta de fondos y una desventaja del 40 % en las encuestas. Pero como el artículo 138 de la Constitución Política de Costa Rica prohíbe la renuncia oficial, se completó el trámite electoral para nombrar al nuevo presidente, que asumirá su cargo el 8 de mayo.

No por esperado, el desenlace deja de ser histórico. Por primera vez en los últimos 60 años asume el poder un partido político que no pertenece a las raíces socialcristianas (calderonismo) o del movimiento de Liberación Nacional, que se venían alternando en el poder desde el fin de la II Guerra Mundial.

La apuesta del PAC ante la renuncia del PLN fue combatir la abstención para buscar la legitimación de un gobierno que deberá enfrentar importantes retos sociales y políticos en los próximos cuatro años. Cerca del 43 % del electorado decidió no salir a las urnas, la cifra más alta en más de medio siglo, pero no tan calamitosa como estimaban los analistas en unos comicios prácticamente sin debate político.

Todos los reflectores apuntan ahora a los próximos pasos de Solís. Hasta hace apenas unos meses, nadie asociaba a este profesor universitario de 56 años y exmiembro del PLN con la silla presidencial.

El presidente electo es hijo de un industrial del calzado. Estudió Historia en la Universidad de Costa Rica y más tarde, gracias a una beca, obtuvo una maestría en Ciencias Políticas y Sociología en la Universidad de Tulane, Estados Unidos.
Desde joven vinculó la docencia con la militancia política en las filas del PLN, donde ocupó cargos de dirección. Fue también  funcionario del Ministerio de Relaciones Exteriores durante el gobierno de Óscar Arias.

Su relación con los liberacionistas se rompió en el 2005. “Me retiré de esa agrupación por la corrupción interna que carcomió a sus dirigencias y por su claudicación a un modelo de desarrollo que solo promueve la desigualdad”, refiere el propio Solís en la página web oficial de su candidatura.

“Somos parte de una generación de liberacionistas que reivindican la vocación socialista y democrática que debe caracterizar al modelo productivo y al régimen político costarricense de las próximas décadas”, escribió en un artículo de esa época, poco antes de integrarse al PAC junto a otros disidentes de Liberación Nacional.

La orientación que asumirá este relativamente joven partido fundado en el 2000 en el gobierno, aún no es clara. Sin embargo, sus principales dirigentes cuestionaron la firma del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos y han sido férreos críticos del aumento de la desigualdad y la falta de avances en la reducción de la pobreza que ha vivido Costa Rica en la última década.

El presidente electo tiene una agenda cargada por delante. El déficit fiscal supera el 6 % del PIB y existen fuertes demandas de los sectores laborales. Al mismo tiempo, el país demanda una mejoría en los servicios sociales que hicieron famosa a esta nación centroamericana pero que han ido perdiendo fuerza y eficacia.

Tiene también la responsabilidad regional de la Presidencia Pro Témpore de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), que ejercerá su país hasta el 2015.

Pero quizás el principal reto de Solís será responder con rapidez a las grandes expectativas de los costarricenses que votaron por un cambio.

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rafael e matamoros dijo:

1

8 de abril de 2014

12:35:41


Me alegra bastante que tenemos nuevo presidente, pero lo mejor es ver los cambios, para ver si se le ayuda al pobre, (obrero y campesino medio ) Saludos a Huberth Mendez.

sonia dijo:

2

8 de abril de 2014

18:55:32


los presidentes que ayeden a la clase pobre, a los que estan en la oscuridad son mal mirados por muchos otros y no permiten que hayan cambios en la sociedad....al pobre siempre lo quieren ver marginado...