El pasado 15 de marzo se desataron los combates en el más joven Estado africano, donde según sus dirigentes hubo una conspiración armada contra el presidente, Salva Kiir.
Según explicó aquí el vocero del Acnur, Adrian Edwards, más de la mitad de los desplazados por el conflicto -mayormente mujeres y niños- proceden de la localidad de Nimule y ahora están repartidos en diversos poblados ugandeses.
La mayor concentración de refugiados está en el centro de tránsito de Dzaipi, próximo a la frontera con Sudán del Sur, donde unos 32 mil 500 personas sobreviven en un emplazamiento diseñado solo para 400.
También más de 18 mil personas de la región de Jonglei llegaron a la localidad de Akobo en Etiopía, donde el Alto Comisionado reforzó su presencia para asistirlos.
El vocero del organismo de Naciones Unidas manifestó la preocupación por la gran cantidad de niños entre los que arribaron a Kenya.
Acnur calcula que unos 10 mil refugiados entraron en las provincias sudanesas de Kordofán del Este y del Sur, aunque Jartum informó que sólo recibió a mil 371.
Medios de prensa sintetizaron que el número de desplazados internos en Sudan del Sur llegó a 355 mil, frente a 200 mil hace una semana, debido a los combates y a la escasez de víveres.
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