La Copa del Mundo de Fútbol acaba de arribar a su fase más emocionante, pues de los cuartos de final en adelante todo será pura tensión. Se está a un paso de la gloria o bien lejos de ella.
Brasil, Francia, Uruguay, Inglaterra, Bélgica, Croacia, Suecia y la sorprendente Rusia han dejado a sus rivales de turno en la cuneta, sea por la vía que sea, y se aprestan a seguir escribiendo su historia. Cuando se está en cuartos nadie quiere regresar a casa.
En esta instancia sobresalen dos duelos que hoy mismo tendrán su definición, quizá cuando usted lea este trabajo ya se conozca el pase de dos de estas selecciones a las semifinales del Mundial.
Brasil ante Bélgica luce como el choque más atractivo de todos. El favorito número uno a la corona ante el «caballo negro». Para Brasil no hay otra que la victoria. Tiene demasiada historia en sus vitrinas como para no llegar a una final. Ha jugado en el certamen un fútbol muy práctico y contundente, sin grandes lujos, pero con muy pocas fisuras. Su defensa ha sido categórica y en el ataque llega con múltiples variantes de gol en el momento más apremiante.
Las dudas están en los lesionados Marcelo, Douglas Costa y Danilo, si logran recuperarse a tiempo, el equipo ganará peso ofensivo. La inhabilitación por tarjetas amarillas del volante Casemiro será muy bien cubierta con Fernandinho, un hombre que hace el trabajo «sucio» casi a la perfección y que no se arruga ante la magia de sus rivales. La clave del triunfo para Brasil está en que su delantero Gabriel Jesús logre sincronía en las jugadas con Willian, Coutinho y Neymar, aunque estos tres se bastan para llevar a su escuadra rumbo a la victoria.
Bélgica tiene un equipo sólido y aspira a llegar tan lejos como a la final del 15 de julio. Para Brasil es su primera gran prueba de fuego. Cuatro años atrás cayó en su primer partido de exigencia contra Argentina en esta misma fase. El entrenador Roberto Martínez tendrá que agregar un volante de contención para pelear en igualdad de condiciones con sus rivales y modificar el esquema de cinco mediocampistas por uno de tres. La clave del triunfo pasa por la inspiración que tengan en el duelo los «magos» Kevin de Bruyne y Eden Hazard. ¿Favorito? Brasil, por muy poco margen.
DUELO ENTRE DOS ARTILLERÍAS POTENTES
Francia versus Uruguay es un duelo de estilos diferentes, aunque resultará muy atractivo. El talento ante la fuerza, la velocidad contra la garra, la magia frente a la táctica.
Los europeos ya demostraron al jugar con Argentina en octavos de final que, cuando se les exige, saben responder de forma rápida y mortal. Poseen un ataque demoledor con Kylian Mbappé que parece no tener límites sobre una cancha. Su defensa necesita mantener la sincronía y evitar desatenciones en la marca. La clave del triunfo pasa porque Paul Pogba se adelante un poco en el mediocampo y reparta juego a sus compañeros, sin olvidar presionar la salida de sus rivales.
Si alguna selección no cambia su forma de encarar un partido, es Uruguay. Entrega, lucha, fuerza y cabeza fría son sus armas contra todos los rivales. Lo suyo no es tocar la pelota, no tiene las piezas indicadas para construir un juego vistoso. Ante esa dificultad, desgasta al rival con rápidos contragolpes y las jugadas a balón parado, así define su suerte… y así ha sido exitosa. Necesita contar con el delantero Edinson Cavan libre a plenitud de forma. La clave del triunfo pasa porque la defensa no permita goles en la primera mitad y controle a la delantera de Francia. ¿Favorito? El plantel europeo, aunque a los uruguayos les encanta jugar en contra de las probabilidades.
RUSIA QUIERE SEGUIR SIENDO PROTAGONISTA
Un duelo donde no están involucrados campeones del mundo lo sostendrán Croacia y Rusia. Para los balcánicos este tiene que ser un partido de puro trámite, no se pueden complicar la existencia con el elenco local, que ya hizo suficiente sacando de la competencia a la gris España. La clave del triunfo pasa porque Iván Rakitic no se quede tan atrás y acompañe en la creación de juego a Luka Modric.
A los rusos una victoria o una derrota por goleada les ha de significar lo mismo. Han avanzado hasta donde ni ellos mismos esperaban llegar. Para seguir con vida, necesitan anular por completo el mediocampo croata y encomendarse a un gol, si es posible en la segunda mitad. Han de hacer un partido sin errores y tapar los espacios en la defensa, para obtener la victoria. ¿Favorito? Croacia, por fútbol individual y colectivo.
LOS VIKINGOS POR LA CONQUISTA DE INGLATERRA
Al fin Inglaterra avanza a los cuartos de final tras decepcionar en los mundiales del 2010 y el 2014. No ha convencido en esta oportunidad con su juego rápido, pero una defensa muy bien armada con un recuperador y líder en la zona medular como lo es Jordan Henderson, le ha permitido instalarse en esta fase. Para vencer a Suecia necesita que Jesse Lingard, Dele Allí y Raheem Sterling regresen a sus posiciones habituales. Precisa, además, de la velocidad por las bandas como algo fundamental para mover a la lenta defensa de Suecia.

Sin la sombra de Zlatan Ibrahimovic, los suecos van a su duelo con los ingleses arropados por un ímpetu ganador. No tocan la pelota de forma bonita, pero saben cerrarse en la defensa y cortar el juego rival en el centro del campo. Su delantera no es nada del otro mundo, sin embargo, Marcus Berg y Ola Toivonen poseen oficio para sobrevivir ante una defensa mucho más joven. La clave del triunfo pasa por varios factores. Para ganar no necesitan mucho, con un gol les alcanza. No tienen a ese hombre decisivo, cualquiera dentro de la plantilla puede ser su héroe y no se va a «hacer el sueco».
¿Favorito? Inglaterra, la profundidad en su banco de suplentes es muy superior, solo requiere el técnico Gareth Southgate señalar al jugador indicado si hiciera falta.
Estos son los ocho protagonistas más fuertes. Mucha estrategia habrá de por medio en estos cuatro partidos. Será difícil ver un juego abierto por todos los planteles enrolados. La premisa parte por ordenar la defensa, cerrar el centro del campo y atacar al contragolpe.
Si se opta por el control de la pelota e ir al frente, igualmente tomarán los entrenadores sus precauciones defensivas. Ese es el fútbol moderno, donde marcar no es lo primero para la inmensa mayoría de los estrategas. Sin embargo, queda la fortuna de que esta ha sido una Copa Mundial donde el gol solo se ausentó de un partido que no tenía mucho en juego: Francia vs. Dinamarca.



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ernesto dijo:
1
6 de julio de 2018
06:15:17
Carlos dijo:
2
6 de julio de 2018
07:48:31
nuevitera dijo:
3
6 de julio de 2018
14:13:44
luis angel arzuaga zamora dijo:
4
7 de julio de 2018
10:45:28
luis angel arzuaga zamora dijo:
5
7 de julio de 2018
10:48:08
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