En un partido extremadamente malo en cuanto a nivel futbolístico, el equipo de Irán consiguió una agónica y espectacular victoria este viernes durante su debut en la Copa del Mundo de Fútbol Rusia 2018.
Varios especialistas pronosticaron que el compromiso Irán vs Marruecos podía resultar un encuentro de baja calidad técnica y así ocurrió en el estadio Krestovski de la ciudad de San Petersburgo.
El éxito iraní llegó en el tiempo añadido, cuando al minuto 90+5´ el delantero marroquí Aziz Bohaddouz remató de cabeza hacia su propia portería, para dar el segundo triunfó al elenco persa en la historia de este certamen.
Durante la cita de Francia 1998 los iraníes ganaron 2-1 a Estados Unidos para estrenar el casillero de las victorias, pero tuvieron que esperar 20 años más para volver a gritar de emoción tras 90 minutos de muy poco fútbol frente al combinado marroquí.
Apenas se notó la presión sobre la cancha por parte de «Los Príncipes de Persia». Desde el minuto inicial Marruecos manejó mejor la pelota, desestabilizando el centro del campo iraní. Sin embargo, los africanos no encontraron la fórmula para abrir el marcador y perdieron fuerzas con el paso de los minutos.
Para la segunda mitad el duelo cayó en un perenne aburrimiento. Cero fútbol y muchas faltas tácticas para cortar el juego del adversario marcaron los segundos 45 minutos. El seleccionado asiático apostó por esporádicos contragolpes que casi nunca llevaron demasiado peligro; mientras «Los leones del Atlas» no lograron imprimirle mayor velocidad a su ataque para abrir espacios en una poblada zaga iraní.
Los seis minutos añadidos al tiempo de descuento fueron justos, ya que a lo largo de los 90 minutos el juego tuvo que ser interrumpido para que ambos cuerpos médicos atendieran a varios jugadores lesionados.
En esa adición de tiempo estuvo el triunfo para los muchachos que dirige el entrenador Carlos Queiróz. Ahora Irán sueña en grande y afrontará su próximo duelo frente a España el 20 de junio con grandes expectativas, aunque la lógica indica que el cuadro ibérico salga como vencedor de la Kazán Arena.
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