Profesionales no causan insomnio a los cubanos

Conocido el serio compromiso que asumirá el boxeo en los próximos Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, conversamos con Alberto Puig de la Barca, minutos antes de que partiera hacia la sede del evento.

El titular de la Federación Cubana de Boxeo destacó que desde Atenas 2004 nuestro país no llevaba a una cita estival un equipo completo co­mo ahora con diez hombres.

Explicó que la VI Serie Mundial significó mucho para que los mu­chachos llegaran a Río en óptimas condiciones. Cumplir una base de en­trenamiento en Argentina de 22 días e instalarse en la sede desde el pasado 18 de julio ha favorecido que todos estén dentro del peso, teniendo en cuenta el día del debut de cada uno acorde al calendario de competencia, agregó.

El también comisionado nacional señaló que, tras rescatar el liderazgo del Campeonato Mundial, con cuatro medallas de oro, haber ganado la Serie Mundial, y sumando los resultados en otros eventos, los antillanos han alcanzado una buena forma deportiva y sicológica de cara al difícil certamen.

De la Barca ponderó la calidad de naciones reconocidas en este deporte como Kazajstán, Uzbequistán, Azerbaiyán, Rusia, que incluso llevarán a púgiles profesionales; sin ol­vidar a Brasil, como la sede. En tor­no a esos rivales —comentó el federativo— realizaron un estudio de contrarios y confían en que con un colectivo de entrenadores, de médicos, sicólogos, fisioterapeutas que han trabajado fuerte contribuirán al éxito de la delegación.

Te­nemos po­sibilidades de igualar la cantidad de medallas de oro que puedan ganar juntos el resto de los deportes para Cuba, lo cual es un compromiso serio, sentenció.

Tras insistirle en el tema de la participación de profesionales en Río, el federativo argumentó que entre los clasificados en el último preolímpico de Vargas, Venezuela, está el norteamericano Andre Ward, campeón de Atenas 2004 en los 81 kilogramos, a quien hoy no lo considera a la atura de Julio César la Cruz, en tanto los dos hombres de los 69 kg que hicieron el grado tendrán en Roniel Igle­sias a un adversario en excelentes condiciones, concluyó De la Barca.