Mijaín López entró al estadio Luis “Pirata” Fuente con la bandera cubana bien en alto, apuntando directo al cielo de Veracruz, México, y la delegación antillana mostró un rostro alegre y desenfadado en la inauguración de los XXII Juegos Centroamericanos y del Caribe.
Sonrisas, complicidad y mucha cohesión se evidenció en el desfile de los cubanos, que regresan a la lid regional con el firme objetivo de recuperar la cima del medallero, tras ausentarse a la pasada edición en Mayagüez, Puerto Rico.
Rodeado por el Paseo de las Jaracandas y el Paseo de las Flores, el imponente Luis “Pirata” Fuente recibió gustoso la invasión de decenas de miles de aficionados, quienes a la entrada tomaron en sus manos el llamado a la paz en una hoja y un llavero de obsequio con lámpara incluida.
La ceremonia comenzó con el canto de los abuelos del Totonacapan, Guadalupe Simbron y la niña Aranza Méndez, en un parque abarrotado desde cerca de las seis de la tarde, cuando las gradas comenzaron a cubrirse de color y algarabía.
Después pudo apreciarse un despliegue de danzas y ceremonias de culturas milenarias indígenas, las cuales fueron el eje del espectáculo nombrado “Vuela Veracruz, un solo corazón”.

Tras los Honores a la Bandera y la interpretación del himno mexicano en la voz de la cantante veracruzana Yuri, se sucedieron el Viaje al Tajín, Danza de Quetzales y Despertar de la Naturaleza, muestras que se apreciaron con la danza de Huahuas, resaltados por su enorme penacho, según reseñó la agencia Notimex.
Avanzado el espectáculo, Javier Duarte de Ochoa, Gobernador Constitucional de Veracruz, brindó un mensaje de paz, hermandad y fortaleza y dijo que la nación mexicana se abre al mundo.
“Veracruz les da la más cálida bienvenida, los recibe un pueblo hospitalario y alegre”, expresó, y no dudó en destacar que “estos son los Juegos de la unidad, estos son los Juegos de la amistad, estos son los Juegos de la esperanza.”
Para ese momento los más de cinco mil deportistas convocados a la cita ya estaban reunidos en el estadio, la mayoría abrigados ante una temperatura visiblemente fresca. Uno de ellos, el tenista mexicano Santiago González Torres leyó el juramento de los atletas y se comprometió a desarrollar unos Juegos limpios, libres de dopaje.
El frío desapareció en un santiamén con la llegada de la antorcha, que dio la vuelta al parque en manos de destacados deportistas mexicanos y finalmente encendió el pebetero en medio de un show de luces y juegos pirotécnicos espectaculares, colofón perfecto para la actuación del cantante puertorriqueño Ricky Martin.
La agencia de noticias Notimex recogió declaraciones del público presente en el estadio, como el joven Roberto Espinoza, de 25 años de edad, quien espetó: “Con esto Veracruz muestra otra cara, es lo que se llevarán los extranjeros. Estar en un ambiente así es maravilloso, no sé cómo decirlo, pero es un privilegio vivir este momento.”
Justo con ese espíritu hoy arrancarán las acciones, la disputa de las medallas en la arena deportiva, en la cual están reservadas las mayores emociones de una cita que promete mucha rivalidad de campana a campana.









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lean dijo:
1
15 de noviembre de 2014
08:49:47
Luis Serrano Terry dijo:
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15 de noviembre de 2014
10:12:31
jose m miro dijo:
3
15 de noviembre de 2014
10:14:31
Franklin Labrador dijo:
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15 de noviembre de 2014
13:09:51
Alexander dijo:
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15 de noviembre de 2014
14:33:36
daisy dijo:
6
16 de noviembre de 2014
19:25:22
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