GRANMA.–Tras el huracán Melissa, las condiciones ambientales han disparado la focalidad del mosquito Aedes aegypti, elevando el riesgo de transmisión de arbovirosis en la provincia.
Los municipios de Jiguaní, Cauto Cristo, Manzanillo y Buey Arriba son los más vulnerables, mientras que Bayamo (específicamente el área René Vallejo) y Río Cauto (zona Máximo Gómez) se encuentran ya en fase de transmisión activa.
Ante este escenario, las autoridades sanitarias han intensificado las acciones de control, que incluyen fumigación en calles y viviendas, tratamiento focal, abatización, higienización y pesquisa activa de casos, con un llamado urgente a la participación comunitaria en las medidas de autofocal doméstico.
El sistema de Salud ha reforzado la vigilancia en grupos de alto riesgo: se ingresa de forma protocolizada a gestantes a término (37 semanas), lactantes, recién nacidos con fiebre (incluso sin otros síntomas), adultos mayores de 65 años y personas con comorbilidades como hipertensión o diabetes.
Las autoridades advierten contra la automedicación, especialmente con aspirina, por el riesgo de hemorragias en casos de dengue.
La situación demanda un esfuerzo conjunto de instituciones, el sistema sanitario y la población para frenar la propagación.
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