.
Temas

 

 

 

 

b2-temas.gif (443 bytes)

El humanismo de quien es una leyenda viva

Vivencias del diputado Carlos Valenciaga, para que el Presidente de los EE.UU. no ensucie el nombre de Fidel Castro

OSCAR SÁNCHEZ

Aplastante el testimonio de un joven que, como él mismo dijo "no necesito de ninguna suma de dinero para trabajar hoy al lado de quien es una leyenda viva, el Comandante en Jefe Fidel Castro".

Carlos Valenciaga, miembro del Consejo de Estado, narró cómo hace aproximadamente dos años un padre desesperado hizo llegar una carta a ese máximo órgano de dirección cubano, pidiendo que lo ayudarán a trasladar a la Patria a su hija, quien esperaba la muerte en un hospital de Estados Unidos, enferma de SIDA, tras su paso por las drogas y la prostitución.

Ya sus hermanos, los mismos que las llevaron al triste final, no tenía dinero para pagar. Ismael González, presente en la sala, vio como en apenas 29 días su hija estaba con él. Era la misma Lazarita que se fue a Panamá, luego México y de allí cayó en las garras de monstruo.

Contó Valenciaga que aquel padre narraba, al producirse 32 días después el descenlance fatal cuánto debía pagar, lo que recibió fue las lágrimas y el abrazo de los médicos del Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí.

Baste ese triste episodio para que el señor W. Bush no ensucie más el nombre de nuestro Comandante en Jefe al salir de su boca. Cómo se puede atrever ante tanta sensibilidad decir que Fidel y los que el mandatario yanki llama sus secuaces se llenan los bolsillos. Ante tanta infamia y ceguera, Valenciaga expresó que su salario es inferior al de cualquier obrero, campesino, o intelectual, porque ellos son los más importantes para la Revolución, nosotros solo cumplimos el mandato que han depositado en nuestras manos.

La diputada Salvadora Pacheco continuó diciendo que el señor Bush se atrevió a formular el disparate de que en Cuba "estrangulamos el desarrollo", cuando nadie ha hecho más por ese desarrollo que el pueblo de Cuba. Se engaña solo él, porque cada visitante, hasta el propio ex presidente de los Estados Unidos, James Carter se asombró ante "la prosperidad y felicidad de nuestro pueblo, alcanzadas, solo con el socialismo".

La sala se estremeció ante el anuncio del Presidente del Parlamento, Ricardo Alarcón,dee que se escucharía una intervención especial, la del pionero Lázaro Castro Delgado. Y se estremeció porque su diminuta figura expresa la estatura gigante de la Revolución, por eso no desaprovechó la tribuna para volver a fustigar al capitalismo.

Lazarito citó a sus abuelas Francisca y Ofelia, quienes no pudieron como él tener acceso a una educación gratuita; se refirió a cómo W. Bush osa proponernos cambios hacia una democracia que no permite la felicidad de los niños, la vejez feliz, el desarrollo científico o los logros del deporte.

"¿Qué nos está proponiendo la América Latina de hoy, esa Argentina?. No, mil veces, no ,dijo, para agregar que ni aun siendo los Estados Unidos una superpotencia militar podrá lograrlo, porque no nos intimidan, pues somos más poderosos los cubanos, porque nos hemos convertidos en una superpotencia de ideas. Y en defensa de esas ideas, Comandante en Jefe Ordene, Ordene, Ordene", afirmó, como el mismo expresara, a pecho lleno.

En versos y con la rima afilada Yoerkis Sánchez, de la Federación de Estudiantes Universitarios, le dijo, al Presidente norteamericano, recordando el discurso del 20 de mayo último que tuvo muchas razones para un discurso bonito, pues lo que no podía pasar es que perdiera las elecciones su hermanito. Denunció que allí, en Miami, donde se abrazó con la gusanera, lo aplaudieron los González (los que secuestraron a Elián) y los asesinos del Ché. Expresó que W. se quedó sin la más mínima ética, decencia o moral, al proponer cambios hacia la libertad, hacia la democracia, ante hombres como los que enlutaron familias cubanas como aquellos que pusieron una bomba en un avión en 1976, los que mataron a cuatro millones de vietnamitas.

Dijo Yoerkis que la lista sería cruel, "y no se asusten porque el propio Bush, puede proponer a Sharon a Premio Nobel de la Paz", y agregó, a usted no le cree nadie, y tampoco puede asustar a nadie", sentenció.

Yoanna Cerdera, de la Federación de Estudiante de la Enseñanza Media, le dijo al señor W. Bush. "Usted no conoce la historia y mucho menos la de Cuba, país al que califica de su principal adversario, haciéndonos con eso un reconocimiento. Para que aprenda, añadió, las tribunas como las que hicimos en Sancti Spíritus, Holguín y Santiago de Cuba, tras sus discursos en Miami y Washington, las más de ocho millones de firmas, la Mega marcha como la llamaron ustedes mismos, y esta Asamblea para reformar la Constitución y hacer intocable el socialismo, no es otra cosa que la continuidad de la dignidad y la valentía de nuestro pueblo y su histórica posición frente a las metrópolis que han querido mantenernos esclavos".

Fue entonces que la capitana Grisel Bergel, de los Comité de Defensa de la Revolución (CDR),le recordó que esa historia comenzó con la guerra de independencia de nuestro mambises en 1868, y es la de hoy en nuestra Batalla de ideas. El socialismo nos ha hecho pensar así, y nos ha dotado de virtudes de las cuales se nutre cada programa de la Revolución, y es el que hace que broten frase como la de Fidel cuando dijo: el hombre tiene que ser hermano del hombre y no lobo del hombre".

Con lágrimas en los ojos, pero con la firmeza de ser inconfundiblemente una mujer cubana la joven Cecilia Valdés, ilustró la historia de ayer y la de hoy. En 1932 una niña dibuja con pedacitos de lápices, para satisfacer su aspiración de ser pintora. Por los campos de Sancti Spíritus, otra lavaba ropa para ganarse la vida . La primera aprendió a leer, la otra, apenas pudo hacerlo, lo cual consiguió solo en 1961 ya con socialismo. Hoy yo estudio economía y trabajo en una fábrica, fui elegida secretaria del sindicato en mi centro de trabajo, presido mi Comité de Defensa de la Revolución y nada de eso me ha costado un centavo. Aquellas mujeres no son de ficción, son mis abuelas. Una nunca fue pintora y ya murió y la otra con 82 años siente orgullo de ver a su nieta con un presente distinto y un futuro feliz. Esa es nuestra verdad y la de nuestro socialismo, atrás ni para dar un paso".

Publicado 26-06-2002

pixelb.gif (34 bytes)Subirtop.gif (129 bytes)

Home