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Temas

 

 

 

 

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¿Es tan difícil ser objetivo?

Pedro de la Hoz

Aunque muchas veces el silencio ha sido norma de los grandes medios norteamericanos a la hora de reflejar las expresiones de respaldo popular la Revolución cubana, estas demostraciones se tornan tan arrolladoras que el más elemental deber informativo termina por imponerse, como ha sido el caso de la sesión extraordinaria de la Asamblea Nacional que hoy continúa debatiendo la propuesta de modificación constitucional que hará del socialismo un sistema invariable.

Pero la obligación de informar, en aras del servicio público, no siempre se hace acompañar por la ética. Ya se sabe cómo el antiguo precepto de que toda información debe ser un reflejo objetivo de la realidad se vulnera con demasiada frecuencia.

Al sur de la Florida, territorio gobernado por el hermano de W. Bush y decisivo escenario del golpe de estado electorero que dio a éste el poder presidencial, The Miami Herald bifurca de manera aviesa sus informaciones, según el público de que se trate.

En la versión en inglés, el titular reza: "Presidente de Asamblea cubana ataca las políticas de Bush". Si se prescinde de la dureza del verbo —pues una valoración exacta de los pronunciamientos de Alarcón al abrir la sesión implicaría el uso del verbo "denunciar", en tanto eso fue lo que hizo con su demoledor desmontaje de las acciones aventureras y demagógicas del mandatario norteamericano—, se aprecia en el título y en la nota misma una voluntad de reseñar lo que está sucediendo en el habanero Palacio de las Convenciones.

Sin embargo, ese mismo diario en su versión en español, El Nuevo Herald (y ya se sabe cuál es el auditorio y a qué intereses sirve), titula: "Reunión parlamentaria deja paralizada la isla". Algo así como tomar el rábano por las hojas y no precisamente las más frescas, sino las marchitas. Al lado del titular, un Fidel ceñudo refrenda un mensaje oblicuo y mendaz.

Ciertamente, en un sector de Miami duele la respuesta cubana a la prepotencia imperial nuevamente desatada el pasado 20 de mayo. Por eso les cuesta trabajo ser objetivos.

En otro punto de la geografía norteamericana, el diario The Dallas Morning News —bien distante de la menor sospecha de inclinaciones izquierdistas— publicó en su edición digital una información de su corresponsal en La Habana que dice: "Más de 8 millones de cubanos firmaron una petición que apoya el gobierno socialista de Fidel Castro como parte de un referendo que finalizó el pasado martes. Este resultado es considerado por la Asamblea Nacional que analiza una enmienda constitucional que declarará el sistema socialista intocable".

Publicado 25-06-2002

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