Para padres y abuelos
Aspiración de cuerpos extraños
JOSÉ A. DE LA OSA
La aspiración de un cuerpo extraño es una de las causas más frecuentes de obstrucción de las vías aéreas en los niños. De ahí que el saber médico aconseje que ante un cuadro de asfixia o insuficiencia respiratoria de instalación súbita en la infancia, justamente ese será el primer diagnóstico a plantear y, por tanto, el primero en descartar.
Doctora Ileana Chávez García.
En una reciente publicación del MINSAP/UNICEF, Manual para la prevención de accidentes y manejo del lesionado, de un colectivo de autores, se subraya que en muchos casos la aspiración no es presenciada por la familia y, a menudo, esta niega incluso la posibilidad del suceso por nerviosismo o eludiendo quizás, inconscientemente, sentimientos de culpa. Sin embargo, en el personal médico debe prevalecer la sospecha de la presencia de un cuerpo extraño.
Aunque resulte ociosa la definición, por elemental requerimiento periodístico diré que se denomina cuerpo extraño a no importa qué elemento ajeno al cuerpo que penetre a través de la piel o por cualquier orificio natural como los ojos, nariz, garganta, impidiendo el normal funcionamiento del organismo.
La doctora Ileana Chávez García, quien es especialista de primer grado en Otorrinolaringología (garganta, nariz y oídos) del Hospital Pediátrico Docente William Soler, de Altahabana, indica que los cuerpos extraños en las vías aéreas —y entiéndase por ello en la nariz, nasofaringe, garganta, laringe, tráquea y bronquios— pueden ser de muy diverso origen, y en su experiencia médica ha encontrado botones, semillas, piedras, granos, papel o cartón, cuentas de collares, fragmentos de hueso, espinas, entre otros.
— ¿En qué edades durante la infancia suelen ocurrir con mayor frecuencia estos accidentes?
— En los primeros años de la vida. En general, cuando los niños comienzan a caminar solos y a llevarse a la boca o la nariz cualquier objeto que encuentren.
— ¿Qué síntomas principales, desde los bebés a niños mayores, nos deben poner alerta?
— Estarán en dependencia del lugar donde se aloje el cuerpo extraño. Cuando están en las vías aéreas superiores (nariz, nasofaringe o garganta) generalmente el niño refiere las molestias o señala que se introdujo "algo", de acuerdo con su edad. En ocasiones no lo dice, y es preciso hacer el diagnóstico por los signos que presenta: secreción nasal unilateral mucopurulenta, y fétida si tiene días de evolución, obstrucción nasal o sangramientos ligeros. Cuando se ubica en las vías aéreas inferiores (laringe, tráquea o bronquios), casi siempre los familiares refieren que el niño presentó un episodio repentino de asfixia, sofocación, tos o cianosis (coloración violácea de la piel).
— ¿Ese cuadro que usted describe es siempre, digamos, aparatoso?
— Cuando lo es ello alerta a la familia para el traslado inmediato del niño al médico, pero a veces ese cuadro es fugaz, seguido de un periodo de normalidad aparente que puede durar horas o días para que se presente tos o falta de aire.
— ¿Alguna medida de primeros auxilios que valore como esencial mientras se traslada al paciente a un centro asistencial?
— Siempre que se presuma la aspiración de un cuerpo extraño debe acudirse de urgencia a un centro asistencial donde existan servicios de otorrinolaringología (garganta, nariz y oídos). Deben ser evitadas, en casa, maniobras como introducir los dedos en la boca u objetos en la nariz con fines de extracción, golpear la espalda del niño, pues ello puede complicar más la situación.
— ¿Qué métodos diagnósticos se aplican ante la sospecha de la aspiración de un cuerpo extraño?
— El interrogatorio a los padres, examen físico del niño y los complementarios requeridos de acuerdo con la sospecha de ubicación del cuerpo extraño.
— ¿Qué materiales aspirados suelen originar las mayores complicaciones a estos pacientes?
— Los vegetales, granos, y entre ellos el maní, son los que más complicaciones de tipo infeccioso producen: bronconeumonías, neumonías, abscesos pulmonares, que revisten la mayor gravedad cuando se alojan en la laringe y la tráquea, pues si no se extraen rápidamente provocan la obstrucción de las vías aéreas y pueden originar la pérdida de la vida de un niño.
— ¿Qué deben tener presente, esencialmente, padres y abuelos?
— No ofrecer jamás alimentos sin triturar a niños pequeños que aún no tengan completamente desarrollada su dentición —los granos de maní, por citar un ejemplo—, porque ello puede favorecer en gran medida una broncoaspiración parcial o total, y comprometer seriamente la vida de nuestros hijos.