Para profesionales de la voz
Afecciones laringeas
JOSÉ A. DE LA OSA
Los trabajadores de la voz —locutores, actores, cantantes, profesores, maestros, entre otros— pueden verse afectados por alteraciones laríngeas que tienen como denominador común o síntoma fundamental la disfonía o ronquera, con los consiguientes trastornos e impedimentos personales, laborales y en el entorno familiar y social.
Doctor Luis Álvarez Lami.
Para aclarar algunas interrogantes sobre el tema, invité a la Consulta al doctor Luis Álvarez Lami, especialista de segundo grado, Jefe del Grupo Nacional de Logopedia y Foniatría y del Servicio de esa especialidad del Hospital Clínico-Quirúrgico Hermanos Ameijeiras. A principios de la década de los ochenta, Álvarez Lami cumplió dos años de misión internacionalista en Benín, República de África occidental.
—¿Cuáles son en Cuba las afecciones de la laringe más frecuentes?
—Las laringitis agudas y crónicas, entendiéndose por estas últimas las inflamaciones laríngeas que se prolongan en el tiempo; los nódulos de las cuerdas vocales, que son pequeñas tumoraciones benignas generadas por traumatismos repetidos de los bordes de ambas cuerdas vocales, dados por el choque fuerte y constante entre ellas cuando la persona habla en voz muy alta. Siguen en orden de frecuencia los pólipos vocales, que se diferencian de los nódulos porque son más grandes y tienen otra constitución. Todas estas afecciones originan lo que conocemos por disfonía o ronquera.
—¿Unas y otras se producen fundamentalmente por las mismas causas: uso excesivo o mal uso de la voz?
—Las disfonías funcionales crónicas y las disfonías por nódulos vocales son producidas, como sugieres, por abuso y mal uso de la voz, que se ven con frecuencia en maestros, cantantes, actores, dirigentes, abogados, telefonistas, y otros, a los que llamaríamos profesionales de la voz, aunque esta no es privativa solo de ellos.
—¿A qué nos referimos, doctor, cuando hablamos del "buen uso" de la voz, y también del "mal uso" o "abuso"?
—Te diría que todo trabajo requiere de un esfuerzo mayor o menor. El uso o trabajo vocal idóneo está muy cerca del mínimo de esfuerzo muscular que realizan las cuerdas vocales para emitir la voz y, por consiguiente, para hablar. Por tanto, el buen uso de la voz está referido a una adecuada cuantía de trabajo vocal diario, a la utilización de una intensidad de la voz baja o media, a hablar con un tono medio (ni muy agudo, ni muy grave), a no hacer realizaciones vocales por encima de nuestras posibilidades, y en el caso de artistas y cantantes, a utilizar un buen mecanismo de resonancia y un adecuado apoyo respiratorio diafragmático. El abuso de la voz es lo contrario a todo esto.
—Veamos ahora los factores predisponentes, entre ellos, el sexo, la edad, hábitos tóxicos, el padecimiento de alguna enfermedad...
—Además de los hábitos vocales defectuosos, existen condiciones personales que favorecen la aparición de disfonías crónicas. Por ejemplo, los nódulos son más frecuentes en la mujer joven y de mediana edad, mientras que los pólipos aparecen con mayor frecuencia en el sexo masculino en las mismas edades. El malsano hábito de fumar ocasiona una laringitis muy específica llamada pseudomixomatosis o laringitis del fumador, que a veces es un paso previo al cáncer laríngeo.
—¿Y en cuanto a agentes irritantes medioambientales, condiciones climatológicas, infecciones virales u otras?
—Sí, en efecto, hay factores predisponentes y a veces desencadenantes de alteraciones laríngeas. Los gases de fábrica y otras instalaciones, detergentes y otros productos químicos, el polvo, la humedad, el frío, el calor excesivo, entre otros, pueden irritar la faringe, laringe, tráquea y bronquios.
—¿Cuál es el tratamiento de elección en la laringitis crónica y la disfonía funcional?
—El tratamiento más importante para estas afecciones diría que es el preventivo, es decir, evitar el trauma laríngeo. Por supuesto, tratar los problemas alérgicos, las infecciones respiratorias altas, no exponerse a irritantes y eliminar el hábito de fumar. Ya una vez establecido el problema, existen algunos medicamentos y ejercicios que se emplean para la normalización de las funciones verbo-vocales.
—¿Y en los nódulos de las cuerdas vocales y los pólipos faríngeos?
—Se tratan con medicamentos antinflamatorios, reposo vocal y ejercicios específicos, aunque no siempre es posible aplicar este tratamiento conservador. Cuando los nódulos se hacen crónicos o el pólipo es de tamaño mediano, se requiere la extirpación.
—Dejo abierta esta pregunta para cualquier precisión...
—El lenguaje, el habla y la voz son dones maravillosos que diferencian la especie humana de la animal. El desarrollo de la sociedad ha sido a expensas de la comunicación entre los hombres. La voz es uno de los componentes importantes de esta comunicación y está conectada con el ambiente emocional y psíquico de la persona. Luego cuando esta se altera, se altera también el estado psicológico del individuo.