Las implicaciones de la deuda externa
y la militarización en el Área de Libre Comercio para las Américas
(ALCA), se debatieron hoy durante un panel del III Encuentro
Hemisférico de lucha contra ese proyecto.
Los delegados a la cita, en el
capitalino Palacio de las Convenciones, coincidieron en la apreciación
de que estos fenómenos son premisas indispensables e inamovibles de
los círculos de poder imperialistas, para concretar sus planes de
anexión de las economías del continente.
En el debate participaron los líderes
obreros bolivianos Evo Morales, del Partido Movimiento al
Socialismo, y Oscar Olivera, de Cochabamba.
Hoy más que nunca el territorio
latinoamericano es indispensable para sostener al sistema político
estadounidense, es por ello que la región se ha convertido en un
asunto de "seguridad nacional" para los gobernantes
norteamericanos, afirmó la mexicana Ana Esther Ceceña.
Su coterráneo Jaime Estay expresó
que el problema de la deuda externa no fue resuelto en las dos décadas
anteriores; y los distintos planes aplicados por los países del
continente para intentar su pago solo mantuvieron o alargaron su
solución en el tiempo.
Sostuvo, además, que los intereses y
utilidades de la deuda alcanzan actualmente un monto superior a los
900 mil millones de dólares, y enfatizó en que los acuerdos con
los acreedores continúan lastrando a los países más pobres.
La deuda es insostenible, y a la hora
de priorizar las políticas sociales, entorpece de una manera
profunda y permanente el desarrollo de las sociedades en América
Latina, dijo la argentina Beverly King.
Otros delegados, entre los más de
mil presentes en este foro en La Habana, denunciaron el envío por
sus gobiernos de soldados a capacitarse en los Estados Unidos —más
de 100 mil en 275 de esas escuelas militares—, con el fin de
afianzar las aspiraciones anexionistas del Norte.
Como coordinadora del panel fungió
Gladys Hernández, jefa del Grupo de Finanzas Internacionales del
Centro de Investigaciones de la Economía Mundial.
(AIN)