Presidida por el Comandante en Jefe
Fidel Castro Ruz, Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros,
se inició en esta capital una nueva jornada de condena internacional
al terrorismo, protagonizada por los más de 400 delegados extranjeros
y cerca de 1 000 cubanos que asisten desde ayer al encuentro
internacional Contra el terrorismo, por la verdad y la justicia en
el Palacio de las Convenciones.
La sesión matutina abrió con el panel
Terrorismo: La memoria, en el que especialistas en el tema,
investigadores, y testimoniantes argumentaron las entrañas macabras
de la Operación Cóndor, alentada y sustentada por la política sucia
y criminal de Estados Unidos contra los países de la región.
Alfredo Boccia, médico e investigador
paraguayo, denunció que el terrorismo de Estado ha costado más de
30 000 víctimas en el Cono Sur Latinoamericano, y en su país
más de un millón de ciudadanos vieron los horrores de la dictadura
desde la triste realidad del exilio. El Cóndor, aseveró, fue el
MERCOSUR del terror, y el conocimiento de lo que fue requiere una
coordinación de la información que tenemos para que la impunidad
termine, que es en el fondo el anhelo de nuestros pueblos.
Hemos logrado abrir una brecha, dijo,
hacía falta este evento para poner las piezas que faltaban en el
rompecabezas del dolor.
Ese terrorismo de Estado debe ser
desmantelado y sus autores y compinches condenados para restaurar
definitivamente la justicia, demandó.
Luego de exponer su desgarrador
testimonio, el joven chileno Manuel Guerrero, cuyo padre fue
secuestrado y posteriormente asesinado durante la ola de terror
desatada en la década de los 70 por la sangrienta dictadura de
Augusto Pinochet, hizo un llamado a los luchadores de los derechos
humanos de todo el mundo a unirse para seguir luchando contra el
imperialismo y a favor del socialismo y la democracia en nuestra
región.
El terrorismo de Estado, aseguró,
busca inmovilizarnos. Mi padre no es una víctima, es un combatiente,
un revolucionario, y por eso fue asesinado. En nombre de toda la
generación que somos hijos de luchadores, también hago un llamado a
la izquierda de mi país para que salga del llanto congelante y
retomemos la lucha para avanzar hasta alcanzar la liberación y poner
fin al imperialismo injusto y sangriento, que no es un grupo de
personas, es un ánimo y una concepción fascista que debemos
extirpar.
Entre los panelistas que intervinieron
en la primera jornada del segundo día de trabajo del foro, que
también preside José Vicente Rangel, vicepresidente de la República
Bolivariana de Venezuela, se encuentran Nora Cortiña, fundadora del
movimiento de las Madres de la Plaza de Mayo, de Argentina; Raúl
Olivera, investigador uruguayo que ha seguido la memoria de los
desaparecidos de su país; y Miguel Bonasso, escritor y periodista
argentino.