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17 de abril de 2005
Votamos y estamos aquí para continuar la batalla
Asistió a las urnas el
96,27% de los electores. Prosigue Fidel denuncias por el respaldo del
Gobierno de EE.UU. a los terroristas
En
un verdadero ejercicio de democracia y pluralismo político, 8 168 253
electores, el 96,27% de los inscritos, ejercieron ayer su derecho a
elegir a los delegados a las Asambleas Municipales del Poder Popular,
según indica el reporte preliminar de la Comisión Electoral
Nacional, dio a conocer anoche el Comandante en Jefe Fidel Castro, al
concluir su Intervención Especial en el Palacio de las Convenciones.
Hoy, confirmó Fidel,
serán ofrecidos los resultados finales, una vez que culmine su
validación, como establece la Ley Electoral.
Votamos y estamos aquí
para continuar la batalla, había dicho al inicio de sus palabras,
para informar a la población del curso de los acontecimientos
relacionados con el terrorista internacional Luis Posada Carriles.
Observamos desconcierto en
el Gobierno de Estados Unidos, como si no supieran qué hacer luego de
nuestras denuncias. Y debemos cooperar en lo posible para que hagan lo
que deben hacer. El costo político sería menor. No nos anima ningún
espíritu de venganza. Tenemos la razón; argumentos irrebatibles,
expresó.
La sesión de denuncias
del viernes tuvo una fuerte repercusión dentro de Cuba y en el
exterior. Fidel informó que todos los materiales de esa reunión
están perfectamente traducidos, por lo pronto en el idioma inglés,
el más universal. Además, hoy lunes, los recibirán todos los
miembros de la Organización de Naciones Unidas, así como otros
muchos miles de personas en el mundo.
El Jefe de la Revolución
señaló que se ha creado una situación complicada, porque se están
haciendo cosas locas, absurdas y chapuceras en EE.UU., que ponen en
una situación moral muy débil al Gobierno de aquel país.
Fidel dijo que esta vez
aportaría nuevos datos para desenmascarar a José Pujol, más
conocido como Pepín, el capitán del barco camaronero Santrina que
trasladó a Posada Carriles hasta Miami. Se trata de un viejo agente
de la CIA y miembro de los grupos especiales de esa entidad de
espionaje con una amplia hoja de servicios en favor de los actos
terroristas contra Cuba y al servicio de la mafia miamense.
Pujol llegó a Estados
Unidos de manera ilegal en los años sesenta; integró algunas
organizaciones contrarrevolucionarias como Comandos L y Alfa 66;
participó en ataques a buques mercantes extranjeros que viajaban a
Cuba. En el 2002 se vinculó a Santiago Álvarez Fernández Magriña,
convirtiéndose, ese propio año, en el capitán del Santrina, de
matrícula norteamericana y perteneciente a una estructura terrorista
anticubana, y utilizado en infiltraciones armadas contra nuestro
país.
REVELADORES ARTÍCULOS
DE PRENSA
Fidel dio lectura a parte
de un artículo aparecido este sábado en el periódico Por Esto, de
Quintana Roo, que profundiza en los hechos relacionados con el
Santrina y su permanencia en el litoral de ese Estado mexicano, donde
según las autoridades competentes, fue sometido a una inspección de
rigor y no hallaron nada irregular.
El Presidente cubano
recordó el largo historial de vinculación de Posada Carriles con las
drogas y el narcotráfico en los mismos Estados Unidos. "Posada
Carriles huele a drogas", dijo.
Le estamos pidiendo al
Gobierno mexicano que investiguen e informen a la opinión
internacional sobre lo ocurrido en su territorio en relación con el
terrorista. Ese barco debió ser investigado más, opinó. Debían
haber indagado más sobre los señores que estaban allí. Debieron
prestarle más atención a la sugerencia que les hicimos de que fueran
rápido al lugar de los hechos, pero tomaron el incidente como
cualquier otro que no amerita sanción alguna porque según las
autoridades competentes los papeles estaban en regla.
Seguidamente Fidel se
refirió a materiales publicados por los influyentes periódicos The
New York Times y The Washington Post, y la revista Newsweek sobre los "íntimos"
del presidente norteamericano Bush, John Bolton y Otto Reich, y el
afán desmedido de ambos por destruir a la Revolución cubana.
Se las verán con nuestro
Partido, nuestro pueblo, millones de combatientes que saben usar las
armas, enfatizó el Comandante en Jefe.
En el artículo de The New
York Times del miércoles 13, donde se cuestiona a Bolton, al que han
propuesto como representante de Estados Unidos en la Organización de
las Naciones Unidas, este acusó a Cuba de estar produciendo armas o
investigando armas biológicas que pudieran ser usadas contra Estados
Unidos. Una brutal mentira que tenía como propósito atizar aún más
la campaña de difamación contra la Revolución cubana.
Según el rotativo
norteamericano, mientras más se dilataba la audiencia en el Senado
sobre John Bolton para el cargo de representante ante las Naciones
Unidas, más ofensivo parecía que el presidente Bush pudiera haber
nominado a un hombre que había convertido el desdeño a ese órgano
internacional en la rúbrica de su carrera en las relaciones
internacionales. La Comisión de Relaciones Exteriores del Senado
desestimó el nombramiento.
Lo último que necesita la
nación es un enviado a las Naciones Unidas que trate de forzar la
inteligencia hacia una interpretación ideológica.
La revista Newsweek, del
13 de abril del 2005, señaló que el ex jefe del Consejo Nacional de
Inteligencia declaró que Bolton visitó su oficina para exigir que el
principal experto para América Latina fuera despedido de su cargo por
considerar insuficientemente alarmistas los análisis del especialista
sobre el tema de la supuesta existencia de armas biológicas en Cuba.
Estas predicciones han sido luego repetidamente desmentidas por el ex
presidente James Carter.
Carl Ford, un veterano
analista del Departamento de Estado, se afirma en un artículo de The
Washington Post, pudiera ser el testigo que vendría a describir ante
el Comité del Senado el comportamiento agresivo de Bolton hacia
funcionarios encargados del tema Cuba.
En el 2002, continuó
leyendo Fidel, cuando se puso a atacar a Cuba mientras toda la
atención de Washington se dirigía hacia Iraq y Al Qaeda, Bolton se
enfrentó con el especialista en armamentos de destrucción masiva del
Departamento de Estado, Christian Westerman y tuvo Ford, como jefe de
la Oficina de Inteligencia e Investigación del mismo Departamento de
Estado, que intervenir en su favor. Nunca más Bolton le dirigió la
palabra. Son rencorosos, gángsters, acotó Fidel.
Leyó seguidamente
párrafos de un artículo aparecido en Newsweek con el título
Investigan intento de golpe para intimidar a funcionarios contra Cuba,
en el que se afirma que investigadores del Comité de Relaciones
Exteriores han contactado al Departamento de Estado y a los Servicios
de Inteligencia para documentar informaciones según las cuales Bolton
valoró como "insuficientemente alarmistas" los análisis de los dos
especialistas sobre el tema de las armas biológicas en Cuba.
Newsweek precisa que
acusaciones en ese sentido han circulado desde por lo menos el 2003 en
los círculos de inteligencia, cuando el Congreso investigó
acusaciones similares acerca de analistas víctimas de presiones para
producir informes alarmantes sobre el armamento de Iraq. Las
audiencias no dieron gran resultado, relata Newsweek.
Otto Reich confesó a esa
publicación, que redactó una carta secreta dirigida a los jefes del
analista Christian Westerman para criticar su trabajo. George Tennet,
ex director de la CIA, resistió las presiones de Bolton y Reich,
cuenta Newsweek.
El funcionario fue
promovido a pesar de la campaña del bandido este, subrayó Fidel.
En comparecencia, ante el
Comité de Relaciones Exteriores del Senado, Carl Ford recordó
desavenencias en el año 2002 sobre la presunta capacidad de Cuba de
elaborar armas biológicas, algo que nunca fue comprobado, pero que
Bolton quería destacar en un discurso.
Otro de los artículos
glosados por Fidel, este de Otto Reich, apareció en el Wall Street
Journal del pasado jueves. Reich afirma que las audiencias del Comité
de Relaciones Exteriores del Senado sobre la designación de Bolton
como embajador de los Estados Unidos ante las Naciones Unidas han
desenmascarado públicamente la campaña desatada para desacreditarlo
y obstaculizar su nombramiento.
También han puesto de
relieve una vez más, siguió leyendo, la necesidad de reformar el
proceso de confirmación del Senado, que se ha politizado tanto que ya
no cumple su objetivo constitucional, según Reich.
Está protestando, dijo
Fidel, de ese proceso, porque allí se le han rebelado contra Bolton,
y quisiera modificar incluso la Constitución de los Estados Unidos,
porque está desquiciado.
Más adelante Fidel
indicó que fueron Bolton y John Wolfowitz, entonces segundo del
Pentágono y hoy Presidente del Banco Mundial (impuesto por el
Presidente de los Estados Unidos), los que promovieron la guerra en
Iraq a base de mentiras. Estos dos señores fueron los más
importantes promotores de los pretextos para esa guerra.
De modo que sobre la
conciencia de esos "caballeros", denunció, pesan más de 100 000
iraquíes que han muerto ya. Y he ahí los frutos siniestros de las
mentiras de estos bandidos que se han constituido en el círculo más
íntimo del Presidente de los Estados Unidos.
Esa guerra, refirió
Fidel, ha costado la muerte de más de 1 500 norteamericanos. Acotó
que al parecer en EE.UU. empieza a formarse una conciencia fuerte de
la responsabilidad de los que condujeron a esa guerra ingloriosa y
costosa.
El Comandante en Jefe hizo
notar que le parecía muy triste para una Secretaria de Estado
(Condoleeza Rice), muy reaccionaria pero mujer inteligente, que la
obliguen a decir, cuando han pasado 30 días de la posible llegada a
los Estados Unidos de Posada Carriles, que no tiene evidencia de la
presencia de ese terrorista en Estados Unidos, y que la teoría de que
está allí es un invento de la Inteligencia cubana. Al menos eso ha
dicho una y otra vez el vocero del Departamento de Estado.
Esa persona debe
comprender que se trata de una chapucería increíble, agregó, y así
no puede haber diplomacia en ningún Estado que se respete a sí
mismo, y en ese país hay muchos políticos, escritores, intelectuales
que se respetan a sí mismos, reconoció.
Sería muy interesante
saber, continuó Fidel, cuándo, dónde, cómo y a quién le dijeron
que Posada Carriles iba a entrar escoltado por Santiago Álvarez,
violando todas las leyes de los Estados Unidos y burlando las tareas
de 15 organizaciones de inteligencia y el trabajo de 180 000
funcionarios y el empleo de 30 000 millones de dólares. Creo que
jamás en la historia ocurrió algo parecido, subrayó.
Acto seguido indicó que
está probado que en el Comité de Relaciones Exteriores están
interrogando e investigando qué hizo este señor que va para las
Naciones Unidas.
Fidel cerró su
intervención con la lectura completa de un artículo aparecido ayer
en The Washington Post con el título de Nadie escucha, que calificó
de "realmente interesante", escrito por la misma periodista que, en el
año 1998, entrevistó a Posada Carriles y escribió entonces tres
artículos en The New York Times.
En la reunión con el
Comandante en Jefe participaron cuadros del Partido y del Estado,
dirigentes de las organizaciones políticas y de masas, combatientes
de las FAR y del MININT, víctimas y familiares de las víctimas de
los innumerables actos terroristas de los Estados Unidos contra Cuba.
(María Julia Mayoral,
Enrique Montesinos, Coto Wong y José A. de la Osa)
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