MESA REDONDA

(8 de diciembre  de 2005)

Subrayan carácter retrógrado y violento
del imperialismo yanki

Arnaldo Musa

Los eventos que se han precipitado desde el 11 de septiembre del 2001 han favorecido en Estados Unidos a sectores sociales que condensan y encarnan las versiones más retrógradas y violentas de la construcción imperial traducidas en la "doctrina Bush". Así, en nombre de la guerra contra el terrorismo, se han suprimido derechos democráticos en el seno de la sociedad norteamericana, en un proceso que recuerda al fascismo.

Tres componentes fundamentales de la ideología de la actual Administración son producto del devenir histórico y de las necesidades norteamericanas para el desenvolvimiento del nuevo orden: 1) una concepción de la supremacía estadounidense, 2) Control del poder, y 3) un arraigado fundamentalismo religioso de Bush y su mensaje mesiánico al pueblo norteamericano. Elementos que se interrelacionan en una argumentación totalitaria que pretende justificar las guerras de saqueo, el colonialismo y la barbarie.

En este contexto se desarrolló la Mesa Redonda Instructiva de este miércoles que, bajo la dirección de Arleen Rodríguez, contó con la participación de prestigiosos intelectuales cubanos y extranjeros.

La doctora Isabel Monarch, directora de la revista Marx Ahora, llamó la atención de que el imperialismo tiene siempre la misma esencia, pero ha tenido diferentes características, y en la actualidad toma un carácter aún más depredador para la existencia humana, y señaló que en Cuba siempre se ha luchado contra este, desde su nacimiento, evolución y la época actual.

La doctora Thalía Fung, presidenta de la Sociedad Cubana de Investigación Filosófica, se refirió a las vivencias y estudios de Lenin sobre el capitalismo y  sus ideas acerca del imperialismo y cómo nace la oligarquía financiera. Apuntó que la teoría del imperialismo no se puede separar de los procesos del colonialismo y la descolonización. La base cognoscitiva de Lenin sobre el imperialismo, en su opinión, está perfectamente viva. En todo ello se cambian los sujetos políticos, pero se mantiene el mismo objetivo de reparto del mundo. "Lenin no solo interviene en nombre de todos los obrertos, sino de todos los países oprimidos del mundo", acotó.

Luego, en una entrevista televisada, el doctor Atilio Borón, de Argentina, secretario ejecutivo del Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales, desmintió versiones mediáticas occidentales y hasta de pensadores de izquierda algo confundidos acerca de que el imperialismo ya no existe, y subrayó que está muy vivo, pero los grandes monopolios, principalmente en EE.UU. dominan la economía mundial, aunque quieran ocultarlo.

El profesor Esteban Morales, del Centro de Estudios de Estados Unidos en la Universidad de La Habana, subrayó que hay que esclarecer ciertas confusiones acerca de que la caída del socialismo soviético se debió al imperialismo, y alertó de que por todos lados se comenzó a hablar de mundialización, globalización, etcétera y no se habla del imperialismo.

"El imperialismo ha cambiado mucho, pero no ha variado su esencia en el modo de producción; subrayó, para afirmar acto seguido que es internacional y globalizado por su naturaleza. "Cosas que se presentan ahora no son tan nuevas", dijo, y explicó que el fenómeno de la globalización acompaña al imperialismo desde sus inicios. "Ahora hay un gran desarrollo de los medios de comunicación y del transporte, que le ayuda a extender sus tentáculos por todo el mundo, saqueando las riquezas de los países del Tercer Mundo. EE.UU. utiliza su poderío militar, las armas, para lograr más poderío económico, como hace en Iraq, en busca de petróleo", agregó.

Rafael Cervantes, jefe de Cátedra de Ciencias Sociales del Instituto Técnico Militar José Martí, dijo que se absolutiza mucho cuando se habla de imperialismo, pero hay que estudiar principalmente a Marx, cómo se crea la elite mundial que genera el proceso de metamorfosis del mundo, no solo en lo político y económico, sino también en lo cultural, para dejar bien imbricado el proceso imperialista. Apuntó que esta oligarquía, desde formas complejas, con un poder económico montado sobre formas políticas nuevas, llegó a controlar organismos internacionales. Afirmó que hay que explicar el imperialismo sobre el sistema de contradicciones: capital-trabajo, que se mantiene actualmente; capital-capital, para distribuirse las riquezas; la lucha dentro de los trabajadores, de los que trabajan y los que no trabajan; el capital financiero internacional y los problemas del medioambiente, etc.

"Debemos ver la ley general de acumulación capitalista y ver cómo se ha ido polarizando el mundo (poca gente muy rica y mucha gente extremadamente oprimida)", dijo, y añadió que hay que subrayar el problema del salario, que no cubre las necesidades de los trabajadores.

En otra entrevista televisada, el escritor y ensayista paquistaní Tariq Ali señaló que las Naciones Unidas no defienden los intereses de los países oprimidos y es incapaz de oponerse a las guerras de rapíña, como la que realizan Estados Unidos y Gran Bretaña contra Iraq. Asimismo, destacó el ejemplo de la Revolución Bolivariana, el papel positivo de Evo Morales en Bolivia, todo lo cual va en contra del imperialismo.

En una nueva intervención, la doctora Isabel Monarch explicó que este imperialismo presenta algo nuevo, se puede hablar de una nueva fase, un nuevo imperialismo, pero la esencia sigue siendo la misma. "Esta fase es sumamente agresiva, facilitada por la caída del campo socialista. Dijo que hay que tener claro que en EE.UU., muy arrogante y agresivo, la clase dominante bipartidista está en alianza con grupos de otros países para extender su dominio". Este imperialismo no busca el control, directo de las colonias clásicas, sino que lleva otras formas; busca el control de los mercados, las riquezas, las materias primas, etc, señaló.

Monarch afirmó que Estados Unidos, desde los sucesos del 11 de septiembre del 2001, se lanzó a un proceso militarista para sacar beneficios, como hace Bush, en nombre de Dios, y como hace Blair, cuando habla de una "guerra ética". "El imperialismo es muy fuerte, no hay que subestimarlo, pero no es invencible", aseveró.

La doctora Daisy Rivero, presidenta de la Sociedad Económica de Amigos del País, informó que su entidad ha realizado tres jornadas de análisis sobre el imperialismo, expuso la necesidad de que nuestro pueblo, principalmente los estudiantes, se armen aún más ideológicamente con documentos que se irán confeccionando al respecto, y apuntó que en los debates se ha señalado el cada vez mayor carácter fascista del imperialismo, la actitud agresiva del presidente Bush, sobre todo su Plan contra el pueblo cubano, y anunció que nuevas jornadas tendrán lugar.

Finalmente, dijo que la globalización es un fenómeno positivo, y que no tiene que ser neoliberal La globalización puede ayudar a la solidaridad y el internacionalismo —algo que ya se habla desde los tiempos de Marx y Engels y tenemos ahora el ejemplo del Che—, y esto entra en el campo de la Batalla de Ideas.

   

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