En la capital, vuelta a las aulas

IRAIDA CALZADILLA RODRÍGUEZ
FOTOS: JORGE L. GONZÁLEZ

Nada más pestañea el agua, Eda López avisa a su casa para que se olviden de ella. Lleva nueve años atenta a los partes meteorológicos, a la grisura del cielo y a los vientos en remolino. Al mar le teme cuando viene bravo y quiere adentrarse en esta zona de Calzada, entre H e I, donde está enclavada la escuela primaria Carlos Hernández y son probables las penetraciones. Bien lo sabe: en 1993 la Tormenta del Siglo dejó su huella de un metro en la planta baja del centro, uno de los 12 del municipio de Plaza con peligro de inundación costera.

En el piso alto de la escuela
Carlos Hernández se preservaron 
el mobiliario, equipos y base material de estudio y de vida.

De entonces acá, no hay lluvia que se anuncie que los trabajadores no queden prestos para subir hacia el piso alto muebles, equipos y todo cuanto haga falta. Esta vez, Iván los movilizó desde el pasado viernes y ayer en la tarde todavía trabajaban reponiendo otra vez muebles, televisores, computadoras, videos, bebederos, ventiladores... para que los 312 alumnos del plantel tengan un lindo día de reinicio de clases luego del susto por lo que vendría y, ¡por suerte!, fue solo amenaza.

Eda, la directora de la primaria, asume la temporada ciclónica como parte de un ciclo anual que no acaba y los pone a prueba cada vez. Y así también parece que la asimila Yusimí Rodríguez, maestra emergente que dice lo que más le preocupa son sus alumnos y familias, "la mayoría evacuados por vivir en una zona baja. Hoy no estoy cansada, lo que quiero es empezar las clases y ver a los niños".

LISTA LA CAPITAL

La casi totalidad de los 1 353 centros docentes de todas las enseñanzas radicados en Ciudad de La Habana reinician hoy las clases tras desaparecer la amenaza de Iván para el territorio. Es decir, los planteles externos y seminternos vuelven a la normalidad, en tanto los internos se incorporarán en breve según el cronograma de transportación. Bajo ese régimen de estudio solo el Instituto Preuniversitario Vocacional de Ciencias Exactas Vladimir Ilich Lenin y la Escuela de Instructores de Arte comienzan este miércoles la docencia.

Ramón Martín, subdirector de Educación en la capital, informó también a este diario que los 281 niños internos que están bajo la protección de las instituciones educacionales estaban desde ayer en sus respectivos centros, los cuales se hallan debidamente organizados.

En horas de la tarde del martes comentaba: "La jornada podemos compararla con un hormiguero en ininterrumpido trabajo: pasamos tres días desarmando todo para preservar cada recurso, y en menos de 24 horas logramos retornar a la regularidad.

"La actitud de nuestro personal en las diferentes etapas decretadas por la Defensa Civil la valoramos de extraordinaria: disciplina y participación masiva en función de garantizar la protección de las escuelas se evidenciaron como nunca antes. También queremos transmitir nuestro reconocimiento a los padres y alumnos que colaboraron".

Un dato más: de los 229 centros previstos para servir como albergues a la población, se utilizaron 157 donde se acogieron a más de 13 000 evacuados. "Todo funcionó debidamente, lo que demuestra la preparación alcanzada para enfrentar eventos de este tipo".

UN QUINTETO COLABORADOR

La Calabacita debió anoche aparecer temprano para Carlos Daniel, Víctor Manuel, Mario Raúl y Luis Eduardo, un cuarteto inseparable de alumnos de la Carlos Hernández que decidió llegarse hasta la escuela para colaborar en lo que hiciera falta.

Damarys, Carlos Daniel, Mario
  Raúl y Luis Eduardo trabajaron
  duro en la jornada del martes.

"Yo vine para ayudar a los maestros. No quiero que se vayan muy cansados para sus casas", eso habló Luis; "Cargué la mesa, pesaba un poco, pero quiero empezar las clases que me gustan mucho", comentó Mario; "Cuando vi la escuela desorganizada me entró deseos de verla como antes. No me gustan los ciclones porque las personas pueden dañarse", reflexionó Carlos; y Víctor, de estreno en preescolar, dijo que deseaba volver a su aula para estudiar porque quiere ser pionero.

Así van las cosas con estos muchachos que de la mano de Damarys Pompa estuvieron ayer trabajando para retornar a la normalidad su plantel: "Iván nos tenía con tremendo susto y yo sé bien lo que se siente porque cuando la Tormenta del Siglo estuve evacuada por vivir en esta zona baja de la ciudad. La desesperación por la penetración del mar en la casa no se olvida nunca, como tampoco aquellas personas que fueron solidarias. Por eso estoy aquí, para ayudar siempre que me necesiten en la escuela, y si no pasa nada, ¡mejor!".

15-9-2004