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   La Lisa una semana después de Charley ANETT RÍOS JÁUREGUI Jesús Gutiérrez, vicepresidente de la Asamblea Municipal del Poder Popular de La Lisa, recibió una llamada a las 10:30 a.m. de ayer. Me acaban de contar que algunas emisoras informaron que en Punta Brava ya hay electricidad, dijo, y eso es una equivocación. Media hora después llegaban vecinos a la sede del Consejo Popular de Punta Brava movilizados por el mismo rumor. ¿Qué situación tenía en ese justo momento la electricidad? 
 Durante la noche del miércoles allí se energizaron algunos circuitos, pero sin que pudiera restablecerse el servicio. Ayer en la mañana pocas áreas tenían corriente y se esperaba que al grueso, no a todas aún, llegara la luz durante la noche. Siempre hay averías y viviendas que por sus características deberán esperar más. El contraste, lógicamente, provoca ansiedad. En los portales, a la sombra, los vecinos esperaban para colaborar en la recogida de desechos y por la vuelta del servicio eléctrico para emprender otras labores. Junto a Arroyo Arenas, La Concepción, El Cano, y el reparto Juan de Dios Fraga, Punta Brava se considera zona crítica dentro de La Lisa. Más de 1 750 viviendas sufrieron daños. Se requieren 8 000 tejas para reparaciones. Ya se han entregado unas 2 000 de fibrocemento y ayer aguardaban por un lote de las llamadas tejas infinitas. Alberto Martínez, presidente del Consejo de Defensa, explicó que en cada circunscripción se creó un punto de dirección que a las 6 de la tarde informa a los vecinos las últimas noticias sobre la recuperación, al tiempo que recoge sus inquietudes. Esta iniciativa se mantendrá hasta el regreso general de la electricidad, para eliminar las zonas de silencio. 
 La Lisa tiene en estos momentos nueve unidades productoras de pan que trabajan para todo el municipio. Ya se bombea agua, aunque algunas zonas siguen sin recibirla y dependen del suministro en pipas. En particular El Cano y áreas de Alturas de La Lisa tienen su fuente de abasto en El Chico (Wajay, municipio de Boyeros) donde aún se rea-lizan reparaciones, según comentó Jesús Gutiérrez. El municipio sufrió 116 derrumbes totales y 5 000 viviendas fueron dañadas. Quedan 200 albergados en centros destinados para ello. Las dificultades energéticas persistían ayer en cinco de sus siete Consejos Populares, mientras 22 brigadas eléctricas trabajaban en el territorio. Servicios Comunales estima que quedan por recoger cerca de 70 000 metros cúbicos de desechos sólidos (hasta ayer se habían retirado 20 000). Decenas de técnicos de ETECSA laboran desde hace días por restablecer el servicio telefónico en 2 000 líneas afectadas en el municipio. La mayoría de las interrupciones (1 700) se debían a daños en el bajante telefónico (cable que va de la caja terminal del poste a la casa), informó Jesús Eloy López, subgerente de la filial de redes de ETECSA en Matanzas, al frente de brigadas de esta provincia, Granma, Santiago de Cuba y la capital, las cuales trabajan en el municipio. 
 20-8-2004  |