17 de
marzo de 2010
En
Haití
Fiebre beisbolera, y sin vacuna
LETICIA MARTÍNEZ HERNÁNDEZ
Foto: autora,
enviada especial
PUERTO PRÍNCIPE, Haití.— Dice el ingeniero Alberto Llamo que
la derrota del equipo santiaguero fue su segundo terremoto
aquí. Ya había vivido las sacudidas del 12 de enero, pero
cuando las avispas cedieron ante Villa Clara el suelo bajo
sus pies volvió a moverse, esta vez con un temblor de diez
en la escala de Richter. Hubo esa tarde nerviosismo, enojo y
hasta uñas comidas con cada jugada indómita. Luego de la
derrota fue difícil hallarlo, la certeza de un "cuero"
villaclareño lo hizo esconderse por un buen rato.
En
Haití también se viven las emociones de la Serie Nacional de
Béisbol.
Y es que en esta nación devastada también se
vive al máximo la fiebre beisbolera. Pareciera que la tierra
querida, y muy ardiente por estos días con la Serie Nacional
de Béisbol, se trasladara hasta cada sitio donde un cubano,
dos, tres, diez... se sientan frente al televisor. Entonces
empieza la nostalgia por aquellos tiempos en que sus gritos
se sumaban al de tantos en cualquier estadio del
archipiélago. Comienza también la algarabía feliz del que
grita más, del que gana más, del que sabe más, y del que
sabe menos, del que en su vida ha visto un juego de pelota
entero pero cuando la distancia del terruño pesa, su
fanatismo puede rozar el límite.
Aquí hasta el que salió de la serie le sigue
apostando a su equipo para la próxima temporada, donde desde
ahora aseguran que las historias serán bien diferentes. Y es
que como muchos dicen, los seguidores de la pelota no
pierden ni a "las postalitas", aunque a última hora muden de
bando como el económico José Luis Delgado, quien cambió el
verde pinareño por el azul capitalino.
Otros hacen pronósticos, y con la mayor
seriedad analizan hasta la más mínima jugada, la más
elemental decisión. Según el ingeniero de Santiago de Cuba,
a su novena le falló el pitcheo, pero más que eso le
faltaron deseos de jugar a la pelota. "Les faltó la ‘garra’
de los campeones". Y ahora ¿quién crees que gane?: "Como veo
las cosas, no hay quien le quite el campeonato a
Industriales".
Emedín Rodríguez no se desprende de la gorra
azul, dice que la lleva a todas partes. Por eso no dudé ayer
en dar crédito a quien dijo que ni para entrar al baño se la
quita. "Este año la victoria es nuestra, claro que ganamos,
lo creo todo el tiempo. Ese espíritu que han demostrado al
final de la temporada no se cae de un día para otro". ¿No
crees que sea un premio exagerado para quien estuvo
tambaleándose durante toda la serie?, le pregunta un
entendido del tema. "Empezamos mal, pero hay deseos de jugar
y eso a veces es más importante que cualquier estadística.
Los estadios se llenan para verlos ganar y el equipo azul
está respondiendo".
Comenta Héctor Miranda, periodista de Prensa
Latina quien por estos días dejó la redacción deportiva de
la agencia para reportar la tragedia de Haití, que no puede
ser imparcial y menos en temas beisboleros. "En cuestiones
de béisbol no hay un cubano que no se crea sabio y entre
ellos me incluyo. Antes de comenzar los play off, di a Villa
Clara, Ciego de Ávila, Cienfuegos y Sancti Spíritus como
favoritos para pasar a las semifinales. Me equivoqué con el
Habana e Industriales. Pero más con los espirituanos, a
quienes lastró el saberse favoritos. Después volví a dar
crédito a Villa Clara, pero solo porque llevo ese equipo en
el corazón, y porque estoy seguro de que, después de 15
años, llegó la hora de que los villaclareños disfrutemos un
título".
Lo cierto es que los cubanos en Haití
también viven la serie de pelota, esa que allá en Cuba llena
estadios y aquí junta en un mismo espacio al médico que
regresa cansado de una jornada de mucho sanar, al chofer que
desanda Haití para llevar equipos médicos y medicinas de un
lado para otro, al cocinero que sació el apetito de
muchos... Pareciera como si un pedazo de terruño lograran
rescatar en medio de tanta tragedia. Como escuché decir a
alguien por acá, solo los play off, esa fiebre beisbolera y
sin vacunas, divide a los colaboradores aquí. Solo cuando
termine, seguirán todos apostando al team grande: CUBA. |