ELECCIONES EN CUBA: EL PODER DEL PUEBLO

17 de marzo de 2005

Nominación de candidatos

Dilema en la 177

Pedro Mora

BAYAMO (M.N).—Cuando Cary levantó la mano para proponer a su candidata, los asistentes a la asamblea de nominación cayeron inesperadamente en una difícil situación: ¿qué hacer ahora?

La vecina que le había antecedido en la palabra argumentó que su propuesto llevaba más de una década representando al pueblo en la Asamblea Provincial, muchos años consecutivos como Vanguardia Nacional e innovador; es un hombre entusiasta, respetado y querido por todos.

Por su parte, Cary, convencida de las aptitudes de la joven que estaba proponiendo, destacó también que ella goza de gran prestigio, es ingeniera industrial, funcionaria política y actualmente aspirante a una categoría científica.

Teníamos dos excelentes propuestas; pero solo uno de ellos podía ser elegido como candidato en esa reunión de vecinos.

El presidente de la Comisión Electoral de la Circunscripción 177, al comienzo del encuentro había señalado que en el pueblo hay hombres y mujeres con suficientes méritos y que por tanto se requerían análisis colectivos, francos, abiertos.

Al concluir todas las propuestas —explicó— las someteremos a votación directa y pública, levantando la mano, en el mismo orden en que fueron hechas. Será nominada la persona que alcance la mayor cantidad de votos.

La elección libre de los vecinos fue cumplida, y ubicó al trabajador de cabellos canos en la lista de candidatos. La decisión colectiva alegró también a Cary, quien con fuertes aplausos y una expresión que le brotó del corazón dijo: "Padre e hija poseen las mismas cualidades".

Todos se miraron y sonrieron, pero Ivón, la esposa del nominado, respiró aliviada y con pasos apresurados emergió de la multitud para demostrar su imparcialidad, y felicitó a ambos propuestos.

   

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