De modales sencillos, afables, cálidos, sin la afectación de los
que se creen el ombligo del mundo, sus vecinos aún no la identifican
como una de las científicas cubanas de mayor reconocimiento
internacional por su aporte a la salud humana, sino como la
muchachita que creció en su pueblo y ahora trabaja en el Centro
Nacional de Sanidad Agropecuaria (CENSA).
Con 39 años, Elaine recibió la Medalla de Oro de la Organización
Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI) por el SURFACEN, un
producto utilizado para tratar a neonatos con enfermedad de membrana
hialina.
Ella desarrolló la tecnología para fabricar este medicamento a
partir de pulmones de cerdos. A estos pulmones se les extrae una
sustancia conocida como surfactante pulmonar, cuya composición es
muy similar en todos los mamíferos, incluyendo al hombre.
Un científico japonés ya había logrado un producto con pulmones
de bovinos, el TA o Survanta. La patente de este medicamento fue
vendida a una poderosa transnacional de Estados Unidos que lo
comercializa a precios muy elevados.
El neonatólogo cubano, Olimpo Moreno, profesor consultante del
hospital gineco-obstétrico Eusebio Hernández, lanzó la idea de esta
investigación que fue asumida por un equipo de especialistas del
CENSA.
Normalmente en nuestros pulmones existen sustancias que ayudan a
inhalar y exhalar, los surfactantes endógenos. Cuando un niño nace
antes de término carece de estas sustancias, debido a que los
neumocitos tipo II, especializados en sintetizar el surfactante
natural de los pulmones de los bebés, son de las últimas células que
se desarrollan en el feto.
La caracterización bioquímica y los primeros pasos en el control
de calidad del medicamento fueron realizados por Wilma Alfonso
Lorenzo, máster en Ciencias Farmacéuticas.
La producción nacional del SURFACEN cubrió todas las demandas del
país el pasado año. Recientemente se inició un ensayo clínico del
uso de este medicamento en el tratamiento del síndrome de dificultad
respiratoria aguda en pacientes de 18 a 75 años de edad.
Por la contribución que ha tenido este producto en la disminución
de la mortalidad infantil en Cuba, recientemente la Organización
Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI), concedió la Medalla de
Oro al SURFACEN obtenido en el CENSA, institución científica que
tiene otro reconocimiento similar anterior por el Stabilak, un
conservante natural de la leche.
El CENSA y el Centro Nacional de Investigaciones Científicas (CNIC)
son las dos instituciones cubanas que mayor número de medallas de
Oro de la OMPI han recibido.
El día que premiaron a Elaine en el memorial José Martí, en la
Plaza de la Revolución, su mamá y su hija Anel, de 9 años, rebosaban
de alegría. Los vecinos, al otro día, les decían en Güines: Vimos a
Elaine por televisión.