Intelectuales del mundo contra la pretensión de condenar a Cuba en Ginebra
De Mali a Japón, diversas voces, un mismo reclamo
Pedro
de la Hoz
Cuando faltan pocas
jornadas para que la Comisión de Derechos Humanos ventile en
Ginebra la resolución con la que el Gobierno de Estados Unidos
pretende sancionar a Cuba, continúa creciendo el clamor de los
intelectuales de diversas partes del mundo que repudian una
práctica moralmente descalificada y éticamente insostenible.
Amirata Traoré.
Al pie del manifiesto Detengamos
una nueva maniobra contra Cuba calzó su firma ayer la maliense
Amirata Traoré, una de las más célebres personalidades públicas
africanas, destacada por su lucha en favor de que las antiguas
potencias coloniales reconozcan su deuda con el desarrollo de un
continente que explotaron y continúan saqueando.
La Traoré, coordinadora
de la Red Internacional sobre la Diversidad Cultural, miembro de la
Comisión Mundial sobre la Dimensión Social de la Globalización,
laureada con el Premio Príncipe Claus (Holanda) y ampliamente
reconocida por sus estudios interdisciplinarios sobre economía,
cultura y desarrollo social, no solo quiso dejar constancia de su
firma al pie del documento, sino manifestó expresamente su rechazo
a una acusación, la que se hace contra Cuba, que carece del más
mínimo fundamento.
Con idénticos
argumentos se pronunció en Tokio el activista social japonés
Hiroshi Tochibara, quien acompañó su rúbrica con un texto en el
que señala que "Estados Unidos debía reflexionar primero
sobre la represión a los derechos humanos generados por su propio
país".
Entre los firmantes
japoneses del llamamiento se hallan el periodista y traductor
Hiroaki Idaka, autor de libros sobre la Revolución cubana y el
proceso bolivariano en Venezuela; la escritora y crítico musical
Mariko Hagaki; y el escritor Katsumoto Saotome, uno de los más
prominentes líderes de opinión en el archipiélago asiático por
sus intervenciones sobre diversos asuntos sociales y culturales en
los principales medios de comunicación.
|