Publicadas
el 22 de julio de 2011
Raúl nos habla en español ¡sin embargo...!
Me motivo una vez más a escribir para abundar quizás
un poco, en un tema en el que estamos inmersos todos los cubanos
actualmente, "la implementación de la actualización de nuestro
sistema económico".
En las directivas de Raúl aparece algo escrito que
es obvio que reflexionemos, y es relacionado a que si hubiéramos
hecho todo lo que nos había venido indicando desde hace años el
líder de la Revolución Fidel Castro, muchas medidas que hoy estamos
obligados a aplicar para salvar nuestro proceso revolucionario,
algunas incluso no tan populares, no hubieran sido necesarias, sin
embargo, aparte de la claridad con que nos habla hoy el actual
Primer Secretario de nuestro Partido en un español impecable, hay
quien o quienes, dan la impresión de que al estudiar sus discursos u
orientaciones lo traducen a otro idioma porque al final, no
entienden nada.
Raúl llama a eliminar la burocracia, a aliviar los
trámites a la población, a resolver los problemas de indisciplina y
desorganización que tenemos en el trabajo, a acabar de resolver el
problema salarial incluyendo el de los jefes que él mismo calificó
como la "pirámide invertida" y sin embargo, es como si se entendiera
que él dice "hagan lo contrario", por lo menos esa es la impresión
que tengo de las cosas que vienen sucediendo en algunos lugares, que
no son la generalidad.
A unos pocos meses de haberse celebrado el Congreso
del Partido todavía existen empresas y organismos que, amparados en
esas orientaciones, adoptan medidas que lejos de resolver los
problemas que tienen en todas estas direcciones lo que hacen es
acrecentarlos más incluso, algunas hasta violando lo establecido en
la ley, tal vez no con carácter mal intencionado pero lo hacen.
Ejemplos pudieran citarse muchos pero voy a
referirme solo a pocos: hay casos de organismos donde sobre la mesa
del jefe yacen hace ya un buen tiempo propuestas de solución de
salario para su análisis y aprobación que incluye a obreros como a
otros y sin embargo, todavía están ahí sin justificación a la espera
de no se sabe qué¼ , y a pesar de
constituir eso una prioridad parece que se olvidan o, en el mejor de
los casos, le restan importancia.
En otros centros se ha aplicado la reorganización
laboral y lejos de prever que al final el mayor porcentaje que quede
de trabajadores directos a la producción o los servicios, según
estipula la ley, constituya el 80 %, hacen todo lo contrario,
afectando la actividad fundamental, llámense servicios de
restaurantes que pueden ser en cualquier sector sin especificar
nombres, pero son realidades que se viven a diario, o la adición de
nuevos trámites burocráticos en procesos ya establecidos que ni
siquiera están en la ley, y lo más triste es que cuando alguien
pregunta por qué suceden estas cosas, la respuesta es simple "se nos
orientó del organismo superior", eso nadie lo entiende, porque
precisamente a lo que se nos ha llamado es a resolver los problemas
y a cambiar nuestra forma de pensar y de actuar y no a complicarlos
haciendo que la población con nuestras a veces erróneas decisiones,
tengan que estarse trasladando de un lugar a otro, incluyendo
territorios distantes, o tener que buscar documentos que a veces son
difíciles de localizar e innecesarios, etc., ¡y qué decir de la
reorganización de algunos servicios básicos que se prestan en las
instituciones de salud como son las consultas especializadas y
tratamientos médicos que ahora los han concentrado en una o dos
instituciones del territorio, pero más grave aún es el hecho de los
que se prestan en municipios montañosos donde se han quitado y ahora
tienen que trasladarse a otros poblados!
Nuestro pueblo, no cabe duda, es patriótico y
revolucionario, que a diferencia de los del resto del mundo se
interesa en la política y ha acumulado en todos estos años
suficiente y vasta cultura en este sentido, por ello le es difícil
entender cuando se habla de lineamientos como política a seguir,
cómo lejos de profundizarse en ellos para buscar soluciones, lo que
hacen muchos es entorpecer con su actitud su desarrollo y objetivos.
Yo sigo diciendo que Raúl nos habla en español, ¡sin
embargo!, si no reflexionamos verdaderamente sobre lo que dice, si
no lo interiorizamos, si no nos apartamos de los estereotipos
tradicionales con los que hemos venido trabajando y si no hacemos lo
que realmente él nos está indicando podremos estar todo lo
preparados que sea intelectualmente y con mucha voluntad de seguir
adelante con nuestro proceso revolucionario que así sí no lo vamos a
lograr porque no entendimos el mensaje. Recordemos que nuestro Héroe
Nacional refiriéndose al idioma decía que "El lenguaje es humo
cuando sirve de vestido al sentimiento generoso o a la idea eterna".
J. Llorente López
“¿Qué es el nuevo modelo económico cubano?”...
Otra visión
A la pregunta responde E. A Fernández en Cartas a la
Dirección del 8 de julio de 2011. Es una respuesta emotiva, sensible
y verídica. Suscribo todas las ideas y cada una de sus palabras.
Felicito por partida doble al remitente: por el contenido y por la
invitación a la reflexión, en un espacio como este, no académico
pero no por ello menos importante, serio y ante todo, popular. En
este sentido, y como economista político añado otra visión que no se
contrapone a la de Fernández, sino más bien pretende integrarse a la
misma. También utilizo el estilo de proposiciones yuxtapuestas:
· Es mantener la economía centrada en la propiedad
social estatal, pero activando las formas de gestionarla y dándoles
oportunidad competitiva a formas no estatales como la cooperativa
(también social) y otras particulares.
· Es utilizar más y mejor las relaciones
mercantiles, pero conectadas económicamente —no administrativamente—
a la planificación y a su instrumento esencial: el plan.
· Es asegurar las condiciones indispensables para
que se haga realidad o se acerque a ella, el principio de
distribución socialista que no es el más justo pero sí el posible y
necesario a la sociedad y al trabajador, para lo que se toman y
tomarán medidas, algunas difíciles como el reordenamiento laboral.
· Es darles mayor responsabilidad al individuo, a la
empresa y al territorio.
· Es utilizar mejor, y estimular más, al capital
humano creado —y en constante creación— por la Revolución.
· Es mantener la justicia social, pero con la mayor
economía de recursos pues estos salen en definitiva de la producción
de bienes y servicios, cuyo crecimiento sostenido y con
productividad será la principal condición del mejoramiento del nivel
y calidad de vida del pueblo.
· Es sustitución del burocratismo y la mentalidad
que le es inmanente por mecanismos económicos ordenados y
supervisados por sus responsables, tarea en extremo difícil, pero
que si no la afrontamos todo lo anterior se puede volver "sal y
agua".
· Es continuidad y ruptura: continuidad del
desarrollo social y económico de los primeros 30 años de Revolución,
la diversidad de formas de propiedad y gestión de los 90 y lo
racional de los programas sociales de la primera década del siglo
XXI; ruptura con todo lo obsoleto, dogmático e ineficiente, de esos
periodos. Por eso el Partido y el Estado prefieren llamar al proceso
de corrección y perfeccionamiento del funcionamiento de la economía:
"Actualización del modelo económico".
Es mucho más que esto, pero los rasgos apuntados son
esenciales, y si uno no puede faltar es el que finalmente relaciona
E. A. Fernández: "Es un modelo que necesita ser económico y
político, para poder continuar defendiendo a la mayoría." Yo también
terminaría así la lista de cualidades fundacionales de la
actualización del modelo económico, porque suele reservarse para lo
último, lo más importante.
C.M. García Valdés
Aplicar una política coherente que dinamice la
recuperación de materias primas
En materia de ahorro a veces parece como si
estuviéramos dando vueltas en círculos; si ya sabemos lo vital que
es para el país y las potencialidades inexploradas que tenemos, ¿por
qué no se aplica una política coherente que dinamice por fin esta
actividad?
Voy a poner, por ejemplo, un reportaje aparecido en
Trabajadores los días 27 de junio y 4 de julio sobre las casas de
compra de materia prima y otro más reciente en Granma donde se habla
de la recuperación del papel que le ahorra al país 360 dólares por
cada tonelada dejada de importar, eso significa que importar una
tonelada de papel nos cuesta 9 000 CUP, sin embargo, en el artículo
se dice que hace poco se le subió el precio de 60 centavos el
kilogramo a 1 peso y se habla de cuanto más se pudiera recuperar si
se ordenara mejor esta actividad y yo me pregunto, ¿acaso no es
posible que en vez de pagarlo a 9 pesos el kilogramo en el mercado,
precio que de seguro no incluye los fletes, no sería más barato
pagarlo a las empresas aunque fuera a la mitad del precio en divisas
que tiene y que parte de ese dinero o su totalidad se pudiera
repartir como estimulación en divisas o en moneda nacional a los
trabajadores? Estoy seguro de que no harían falta tantos planes ni
tantos llamados y de paso se eliminaría una buena parte de la carga
contaminante que en casi todas las empresas de este país aportan las
compañeras de limpieza cuando queman el papel que se desecha en las
oficinas.
Lo mismo pasaría con periódicos y revistas usados y
otros materiales y si esto se extendiera a la electricidad, por
ejemplo, creo que serían muchas las empresas que sobrecumplirían sus
planes al tener sus trabajadores el ahorro como una fuente de
ingresos y estimulación.
En fin, que si seguimos así, en este como en otros
temas nos pasaremos la vida denunciando y señalando, pero creo que
de sobra sabemos nuestros problemas y de lo que se trata es de
accionar inteligentemente para resolverlos y si para cada cosa hay
que esperar por leyes, decretos leyes, resoluciones, lineamientos,
reuniones del Consejo de Ministros, etc., la vida nos va a pasar la
cuenta y ya sabemos que no hay otra oportunidad sobre la tierra para
un país como el nuestro en estos tiempos de crisis.
R. Cuenca Llorente
El papel de los cuadros
El Comandante Ernesto Che Guevara en los primeros
años de la Revolución escribió un trabajo titulado: El cuadro,
columna vertebral de la Revolución, el cual contiene muchos aspectos
que tienen una gran vigencia en estos momentos en los que el país se
propone vencer grandes dificultades y salir adelante y en los cuales
los cuadros están llamados a desempeñar el verdadero rol que les
corresponde.
Leyendo el periódico Granma nos percatamos de cuánto
nos falta para que esa marcha hacia adelante pueda triunfar cuando
muchos de esos obstáculos a superar dependen de nuestros propios
cuadros. Para ello voy a valerme de artículos publicados en este
órgano de prensa en los últimos días del año en curso.
Con fecha 24 de junio se publicó el reportaje: Ecos
de ilegalidad, el que comienza planteando: Un día almacenaron
elementos prefabricados de hormigón; otro dejaron un poco de tierra,
escombros, restos de poda de árboles; al mes siguiente comenzaron a
aparecer sobras de comida, latas vacías, pomos, cartones¼
Y así, a la vista de todos, el terreno comenzó a llenarse de
‘’cosas’’.
Luego se plantea: Sin embargo, en el transcurso de
estos años, ni la Dirección Administrativa de este centro, ni la
empresa constructora que actúa como contratista de la inversión,
tuvieron entre sus prioridades mantener la ‘’vista’’ sobre este
terreno. Ello provocó que desde el 2010, poco a poco se convirtiera
en un ‘’basurero’’ de uso público¼
De igual forma pudieran tomarse notas de los
artículos: La cuerda floja no se estira, del 27 de junio sobre
producción y comercialización agrícolas; El efecto dominó de los
incumplimientos, del 29 de junio acerca de la extracción de cemento
en la Empresa 26 de Julio de Camagüey y Salideros de insensatez y
mala factura, del 1ro. de julio sobre el acueducto de Manzanillo.
Concluyo esta parte de la carta con las palabras del
campesino Ismael Matos Guzmán en el reportaje titulado En el café no
hay fatalismos, sino ineficiencia, del 25 de junio: ‘’Recuerdo con
nostalgia aquellos tiempos, cuando la gente de arriba nos visitaban
y alentaban’’, expresa para ilustrar a su manera, el frecuente
diálogo que entonces sostenían los dirigentes de la empresa, de la
ANAP, del Partido y del Gobierno con la base productiva, ejercicio
que desafortunadamente se perdió, con grave daño para la producción
cafetalera.
En medio de este mar, qué agradable resulta leer el
artículo, publicado el 22 de junio, titulado: En Cayajabos sí hay
caña, en el que se relata que la CPA Cuba Socialista, dirigida por
Ana Bueno Guzmán obtuvo en la pasada zafra un rendimiento de 84
toneladas por hectárea que la sitúa en el quinto lugar nacional
entre todos los productores cañeros que cultivan en secano o con
regadío.
La Presidenta afirmó que: Lo primero es estar junto
al trabajador, escuchar sus inquietudes y criterios, ser exquisitos
en la preparación y alistamiento de la tierra y lograr una siembra
adecuada¼
El cañero se siente también estimulado al elevar sus
ingresos mensuales y comprobar que el esfuerzo y el duro bregar no
son inútiles.
Observando estos reportajes publicados en los
últimos días y volviendo al título que tomamos para esta ocasión,
nos surgen varias interrogantes que queremos compartir.
¿Qué papel realmente desempeñan muchos de nuestros
cuadros en los cargos que ocupan y a qué se dedican cuando en su
radio de responsabilidad pasan estas cosas y no las ven? ¿Qué
responden a estas situaciones los cuadros que ocupan cargos
superiores a los de las empresas, hasta los ministerios, que se
supone deben conocer lo que está pasando abajo, para evitar que
estas cosas ocurran? ¿Qué les impide a nuestros cuadros, de todos
los niveles, tener un vínculo más directo y efectivo con los
trabajadores y retroalimentarse en ese proceso tan valioso? ¿Cómo
vamos a enfrentar el proceso de implementación de lo acordado en el
reciente Congreso del Partido, cuando muchos están adaptados a un
sistema de trabajo que no es el que se necesita ahora? ¿Por qué la
regla no es encontrar cuadros como Ana Bueno Guzmán y no que con
dolor la vemos como una excepción?
N. Amador Torres
Mucho ruido… y pocas nueces
El debate en curso sobre "la guerra de los ruidos" a
que está sometida la población de la capital ya pasa, como dice el
viejo refrán, de castaño oscuro.
Creo que mucho se ha hablado y no se ha hecho, en la
práctica, nada. Considero que las palabras, las explicaciones, las
advertencias, ya están dichas: es hora de pasar a la acción.
Una simple resolución de la autoridad de transporte
podría poner fin a esa anomalía de someter al pasajero de los
ómnibus urbanos al escándalo musical que instrumentan no pocos de
nuestros choferes. No tengo noticias de que en otras ciudades del
mundo ocurra semejante cosa. Y no se trata del tipo de música ni la
cantidad de decibeles (nadie tiene un equipo portátil para andar
midiendo decibeles por la calle), sino de que la música en la
guagua, además de molestar a los pasajeros, distrae la atención del
chofer de lo que es su trabajo: conducir adecuadamente el transporte
público que se ha puesto en sus manos. Es una posible causa de
accidentes. Lo mismo ocurre con los autos de alquiler ruteros, los
"boteros".
La eliminación de la música en los ómnibus, en
nuestras guaguas, es algo sencillo: no solo prohibirlo, sino retirar
el equipo reproductor de los vehículos. Cero equipo, cero música,
cero ruidos. Podrían instalarlos en algún lugar del paradero de las
rutas para que los choferes, una vez terminado el viaje, descansen y
oigan su música preferida.
En el caso de los boteros, la prohibición puede
estar apoyada por medidas punitivas tales como el decomiso del
equipo de música si no cumple lo establecido. El que no quiera
respetar la ley, debe ser sancionado. Eso es muy educativo.
Otros organismos pueden también tomar medidas
similares y en sus instalaciones pueden ahorrar mucho ruido
agresivo. Bastan decisiones administrativas que están sobradamente
justificadas, tanto médica como éticamente. Turismo, por ejemplo, no
es bullicio extemporáneo en lugares inadecuados. La alegría de
nuestra música en los lugares y horarios apropiados y hablo de los
comercios y de la gastronomía. Por favor, que no den más excusas
vacías: actúen.
Con ese inicio se puede seguir avanzando hasta
llegar a los particulares que no saben convivir con los vecinos. Ahí
sería el turno de la policía, ese imprescindible brazo ejecutivo de
la legalidad socialista en nuestro país.
Los chinos, desde la antiguedad, dicen que una larga
marcha comienza con el primer paso. Comencemos a actuar: vale la
pena.
R. Ramón López
Rodeo en El Rodeo
4 de julio del 2011
1:45 p.m. De casualidad paso frente a la parrillada
El Rodeo, ubicada en plena Ciudad Deportiva. Aprecio un gran cartel
con una serie de ofertas en moneda nacional. Decido almorzar.
1:50 p.m. Entro junto a tres personas más. Me siento
en una mesa que tengo que compartir con alrededor de 10 moscas.
1:55 p.m. La dependienta atiende a las tres personas
que pasaron conmigo.
2:00 p.m. Entran otras cuatro personas.
2:05 p.m. La dependienta atiende a las cuatro
personas.
2:10 p.m. Intento tener la atención de la
dependienta.
2:15 p.m. Finalmente, algo molesta, la dependienta
se acerca a mi mesa. Le pido el bistec de cerdo que se oferta por 15
pesos y una malta. La dependienta me dice que no está saliendo ese
plato, pero me oferta un bistec de cerdo con arroz frito y ensalada
por 40 pesos, que no está en la carta. Le digo a la dependienta que
yo solo quiero el bistec de 15 pesos, ella me da una respuesta que
aún no entiendo: "la porción de 15 pesos está congelada, solo
tenemos la de 40 pesos".
2:20 p.m. Tengo mucha hambre y accedo a la oferta de
40 pesos y le pido el libro de quejas o del consumidor. Le pregunto
por qué atendió primero a la mesa que llegó más tarde que yo, me
responde con una sonrisa (la primera sonrisa y única que veo en la
dependienta).
2:30 p.m. Me sirve la malta y cuando le voy a
preguntar por el libro de reclamos se hace como que no me escucha y
va atender a otros clientes.
2: 45 p.m. Veo a la mesa que llegó después de mí,
comiendo. Yo sigo esperando, comienza a llover.
2:55 p.m. Se acerca a mi mesa otra dependienta, que
con mayor profesionalidad me dice que me merezco una explicación. Me
alegra saber que alguien finalmente se preocupe y me atienda en
forma profesional. Me dice: "Como usted sabe, esto es una
parrillada, y como está lloviendo no podrá cocinarse más, ya que la
parrilla se moja¼ " Le pregunto si me
puedo comer el arroz frito y me responde: "Lo siento, está frío". Le
solicito el libro de reclamos y me dice que no tienen ningún libro
para reclamos ni para la protección del consumidor. Le solicito
hablar con el administrador, me dice que no se encuentra. Le
pregunto si el administrador fue a trabajar hoy, me dice que lo vio
por la mañana. Le pregunto si sabe donde está. Me responde que no
sabe y que "seguramente está reunido". Yo me imagino qué tipo de
reunión debe demorar desde la mitad de la mañana hasta pasadas las 3
de la tarde.
3:05 p.m. Le pido hablar con el segundo a cargo del
complejo, me dice que no sabe quién es¼
le insisto hablar con la persona responsable del lugar. Me dice que
va a averiguar.
3:10 p.m. Regresa la misma dependienta y me dice que
espere un poco, que van a localizar al segundo a cargo.
3:20 p.m. Sigo esperando, pago la malta a 65
centavos de CUC.
3:30 p.m. Tengo mucha hambre, nadie aparece.
3:35 p.m. Decido marcharme, no puedo seguir
perdiendo el tiempo y sin almorzar.
Me imagino que la reunión del administrador haya
sido más productiva que las casi dos horas que perdí por la
ineficiencia administrativa¼ ¿A quién le
reclamo? Lindos los derechos del consumidor cuando están escritos,
pero que feos cuando hay tantas violaciones y maltratos a los
clientes.
R. González Hidalgo
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