Ese fue, es y será el objetivo de Cartas a la Dirección, independientemente de que coincidamos o no, en su totalidad o en parte, con los criterios y señalamientos que se nos trasladan.

Sabemos que es imposible satisfacer a los miles de lectores que anualmente nos escriben, nos llaman o solicitan intercambios para manifestar personalmente preocupaciones o, simplemente, pedir la información u orientación que no han podido obtener por otras vías por una razón u otra, no siempre comprensible tampoco por nosotros.

Cada semana, estén seguros, nos esforzamos por seleccionar las mejores misivas y mensajes, aquellos que resultan más abarcadores o generalizables, que abordan problemas acuciantes del quehacer cotidiano o que son, en determinado momento, punto de mira de la opinión pública, o asuntos de la actualidad política, económica y social que generan debates por la diversidad de consideraciones expuestas; por tramitar con los organismos y entidades que corresponda, las de carácter personal referidas a ese, lamentablemente, frecuente maltrato que se recibe en oficinas, establecimientos y centros, cuya razón de ser es servir a la población; por informar y orientar lo mejor posible a quienes se dirigen a nosotros, aun cuando no sea nuestra función.

Cuando pasamos balance a nuestras estadísticas en el 2012, apreciamos gratamente la confianza que ustedes nos expresan en los más de 3 700 correos electrónicos dirigidos a Cartas¼ y cerca de 80 mil 300 generales enviados al diario que hemos recepcionado, las casi 2 900 cartas postales procesadas, las más de 9 000 llamadas y de 500 personas atendidas en nuestro departamento de Atención al Lector durante el año.

Próximos a cumplir el V aniversario de Cartas a la Dirección, les reiteramos nuestra disposición de continuar en el camino de satisfacer sus expectativas que, como siempre señalamos, son también las nuestras.

Les deseamos a todos un feliz y venturoso 2013.