13-01-2003
Confianza infinita en la verdad de la Revolución
OSCAR SÁNCHEZ
Razones le sobran al
capitán del Ejército Rebelde, quien estuvo a punto de caer en
combate en el asalto al cuartel de Veguitas el 16 de diciembre de
1957, "pues si coincidimos en que este movimiento deportivo
sepultó el profesionalismo a partir de la participación del pueblo
en las actividades de la cultura física, entonces irremediablemente
el Moncada parió al deporte socialista cubano como lo hizo con los
niveles de salud, de educación, de asistencia social, de cultura
general integral con que cuenta hoy el pueblo".
Felipe Guerra Matos tuvo
el privilegio de ser el primer director de Deportes de la
Revolución, y hoy 13 de enero, cuando han pasado 44 años de la
entrada de la Revolución al universo atlético, lo recuerda con la
cualidad más preciada en este hombre que ya dobló la esquina de
los 70 años, pero con paso juvenil.
"No se puede ver
como un mérito, aunque sí lo considero como una misión
histórica, como todas las que se dieron al principio de la
Revolución, pues la expresión de victoria estaba, y está,
justamente en la condición de invencible de aquel movimiento que
triunfó el Primero de Enero de hace 44 años", dijo.
Recordó que en aquellos
días el cambio recibía a un país socialmente muy deplorable.
"No voy a dar datos de salud y educación de aquel momento, los
saben ya nuestros jóvenes, aunque bastaría decir que ni nos
podíamos curar ni aprender a curarnos. En el deporte pasaba lo
mismo, solo béisbol y boxeo profesional, como regla. Nada de
participación, sí me atrevo a ser absoluto, exactamente nada de
participación, porque el sistema no lo permitía. Un país vendido,
no puede desarrollar ni siquiera la educación física. Solo una
obra social como la nuestra, que demanda de su pueblo para su
desarrollo y fortalecimiento, puede multiplicarse a sí misma",
sentenció.
Fue enfático y preciso
cuando explicó cómo los principios del deporte revolucionario han
tenido una coherencia histórica muy sólida.
"Si uno revisa lo
que el Comandante en Jefe dijo en Enero de 1959, en la Ciudad
Deportiva, nadie podría rebatir que la idea desde el mismo Día de
la Victoria, desde la propia plataforma del Moncada, es la que hoy,
seguimos defendiendo y la que nos permite la posibilidad de
multiplicarnos.
"El dijo entonces: Construiremos
miles y miles de campos en toda la República... hoy tenemos
más de 11 000 instalaciones; el deporte individualmente,
suaviza. Consigue que no se extravíe la mentalidad del joven...
hoy en el proceso de prevención social, la actividad deportiva es
vital; es preciso que en lugar de un centenar de atletas hayan
decenas de miles... hoy solo en los Juegos Escolares Nacionales,
no ya en las Escuelas de Formación de Atletas de Alto Rendimiento,
participan más de
10 000 estudiantes-deportistas; el mejor estímulo que puede
crearse para el atleta es asegurarle su retiro y saber premiar a los
que llegan a campeones. No me luce correcto que los héroes del
deporte, nuestros campeones, queden después en la miseria. Eso no
sería estímulo al deporte... hoy existe todo un programa de
Atención al Atleta, con salario decoroso, con asistencia médica de
primer nivel, a él y a su familia, hay una preocupación y
ocupación del estado para ese hombre que tantas glorias ha dado a
su país, a la Revolución, al socialismo", expresó.
Visiblemente emocionado,
refirió que esos conceptos fueron los que hicieron realidad otra de
las expresiones de Fidel hace 44 eneros. "Solo así, sobre ese
soporte —continuó Guerra Matos—, podía expresar el Jefe de la
Revolución hace más de cuatro décadas algo que tanta vigencia
tiene hoy. Dijo: Venimos decididos a impulsar el deporte a toda
costa, llevarlo tan lejos como sea posible, pero para ello es
necesario la ayuda de todos: de atletas, dirigentes, de organismos,
de comentaristas deportivos".
Y agregó, "fíjate
que ni ustedes los periodistas quedan fuera de la contribución a
ese desarrollo, y la realidad lo ha demostrado, el esfuerzo de
todos, que es el esfuerzo del pueblo, de su Revolución, ha
convertido a este pequeño país en una potencia deportiva mundial.
Por eso hoy, debemos sentir la satisfacción y más que eso la
confianza infinita en la verdad de la Revolución, pues ella ha
cumplido". |