Una nueva edición del título, bajo el sello de la Editora
Política, destacó entre las presentaciones realizadas ayer, en la 23
Feria Internacional del Libro, en la sala José A. Por-tuondo de La
Cabaña. A cargo de Julio Chirino, cónsul de Venezuela en nuestro
país, la introducción a los lectores cubanos de Antes de que se me
olvide contó con la participación de su protagonista y su autora.
Luego de realizar un breve recorrido por sus páginas, en donde
aparecen trazos de la vida personal y carrera política del líder del
proceso bolivariano, Chirino (quien fuera compañero de Rodríguez
Araque en la guerrilla) catalogó el libro de extraordinario aporte y
de obligada referencia para el estudio.
"Estoy seguro de que este libro estará en un lugar de honor en la
bibliografía del tema petrolero en Venezuela. El currículo de Alí
difícilmente sea igualado en nuestro país", afirmó Chirino sobre el
otrora Ministro de Relaciones Exteriores, de Energía Eléctrica y
Presidente de PDVSA de la República Bolivariana de Venezuela.
Igualmente, Elizalde definió a su entrevistado como "un hombre
del Renacimiento" y valoró el testimonio como "una especie de
salvavidas para en-tender los procesos que conmocionan a América
Latina".
El plato fuerte de la tarde lo protagonizó el propio Alí. En su
intervención, el Secretario General de UNASUR, no solo agradeció a
la autora y al Comité Organizador de la Feria del Libro por la
invitación, sino que disertó sobre la situación actual de su país y
la verdadera génesis de estos conflictos protagonizados por la
ultraderecha venezolana.
Con una evocación al líder bolivariano, el político explicó que
los ataques comenzaron cuando hace 15 años Chávez ganó las
elecciones ampliamente. "Chávez venía de los sectores más humildes,
fue un líder que unificó la voluntad nacional en grandes objetivos y
promovió los mecanismos de integración en América Latina y el
Caribe".
"En el mundo se escenifica un conflicto entre los dueños de la
tierra y los dueños del capital, esa es la raíz del conflicto en
Venezuela, el mayor reservorio de petróleo del mundo.
"Sin embargo, somos una gran nación fragmentada y nos ha faltado
visión. Eso ha venido pasando en nuestro continente también. Cuando
seamos una nación para sí —dijo aludiendo al concepto hegeliano—
cambiará la suerte y podremos decir que reina la paz y la democracia
en nuestros pueblos", sentenció.