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La pupila contemporánea de Rubén
En la Casa del Alba Cultural se celebró este sábado el Encuentro
de Historiadores, dedicado al 80 aniversario de la muerte de Rubén
Martínez Villena
Madeleine Sautié
 Si
una idea cuajó en el Encuentro de Historiadores, inserto en la Feria
del Libro y celebrado este sábado en la Casa del Alba Cultural, fue
la de traer a las actuales generaciones de cubanos la ejemplar
figura de Rubén Martínez Villena, en cuya personalidad se amalgama
con total integridad el intelectual y el revolucionario.
A propósito del 80 aniversario de su desaparición
física, acaecida el 16 de enero de 1934, fue celebrado el coloquio,
que apeló a la necesidad de dialogar con este hombre de singular
talla, cuya vida plagada de actos en pos de la justicia social y de
la belleza, debe conocerse más profundamente.
Defendida con pasión la propuesta por Iroel Sánchez
Espinosa, editor del blog La pupila insomne y uno de los
participantes del panel —que moderó el doctor Felipe Pérez,
Presidente de la Unión de Historiadores de Cuba en La Habana— centró
sus argumentos en la utilidad de insertar a Villena en la lucha
ideológica cubana actual y en el permanente estudio de su
pensamiento para "resolver muchos de los problemas que tenemos".
Abogó por la responsabilidad que tienen los
intelectuales de hoy de divulgar la esencia del joven Rubén, cuya
obra —apunta— conmueve a cuanta persona la conozca y recordó las
palabras que le escribiera el poeta a su amigo Raúl Roa en defensa
de la hermosura y el equilibrio.
"Mi visión del mundo ha cambiado, sin embargo amo la
belleza mucho más que antes, pero ahora sé que sin pan y justicia la
belleza es un remordimiento, un gravamen de conciencia. Por eso he
consagrado mi vida a la justicia, el pan y la belleza".
Como muestra de la fuerza expresiva de su poesía,
Sánchez citó el poema A una cubana, donde exalta la belleza de la
mujer, capaz de "endulzar" —para hacer uso de sus propias palabras—
"el arancel" puesto entonces por el imperialismo a la Patria.
Las investigadoras Caridad Massón Sena y Juana
Rosales García abordaron respectivamente: "La primavera del
comunismo en América, de 1900 a 1934", a donde asoma la figura de
Rubén junto con la de Julio Antonio Mella, y el "Nacionalismo y
marxismo en Rubén".
Las intervenciones describieron la incansable faena
del luchador comunista, que militó en el primer partido marxista y
leninista cubano y del que redactó no solo el manifiesto de su
Comité Central contra la Conferencia Panamericana celebrada en La
Habana, sino el que promulgara el Partido con motivo de la muerte de
Mella.
La época de fundación de los primeros partidos
comunistas, la política expansionista e intervencionista de los
Estados Unidos, el impacto de la Gran Revolución Socialista de
Octubre y la Internacional Comunista, vistas en relación con esta
personalidad histórica, así como su formación política, la
influencia que ejerció en él el entorno familiar y las figuras de
Martí y Lenin, fueron tocadas puntualmente por las especialistas.
Con particular énfasis se destacó la persistencia de
Villena y Mella en estudiar más a fondo la literatura marxista a la
que tuvieron acceso, de manera que no les fue suficiente consultar
interpretaciones de esa materia sino que bebieron de los propios
textos de los clásicos.
Rubén fue también valorado en su condición de poeta
en la voz de la investigadora Cira Romero, quien recordó el hecho de
que Rubén renunció a ser poeta para dedicarse a torcer el rumbo
descalabrado de su país.
Poemas como Defensa del miocardio inocente, Peñas
arriba, La pupila insomne, Homenaje al monosílabo ilustre, Canción
del Sainete Póstumo, Insuficiencia de la escala y del iris y El
gigante, fueron reseñados en la exposición para explicar temáticas y
rasgos de su obra poética a la vez que valoró su prosa, menos
conocida que la lirica, pero igualmente exquisita. Consideró el
ensayo Cuba, factoría yanqui, el más cabal dentro de su
interpretación marxista de los acontecimientos históricos.
Pedro Ross Leal, presente en el coloquio, convocó a
los historiadores a "penetrar las paredes" de los lugares, entre
ellas las tabaquerías hasta donde deben llevarse por medio de la
palabra y la lectura la vida de hombres como Villena.
Los libros Comunismo, socialismo y nacionalismo en
Cuba (1902-1958), compilación realizada por Massón Sena, y la
reedición de la biografía de Villena, El fuego de la semilla en el
surco, de Raúl Roa García, sellaron inicialmente la velada que con
toda seguridad concluirá con estas la lecturas. |