Hoy hemos venido a levantar la bandera
de la dignidad de Cuba y la bandera de la dignidad de la Revolución
Bolivariana como dos banderas hermanas que caminan juntas los nuevos
rumbos de la dignidad.
Somos pueblos hermanos, tenemos un
largo camino recorrido: cubanos, hijos de cubanos, nietos de cubanos
regaron su sangre en Suramérica, para buscar la libertad y la
independencia en el siglo XIX, junto a las tropas bolivarianas;
nietos, hijos de venezolanas y venezolanos regaron su sangre en las
guerras de independencia de Cuba.
De atrás viene nuestro amor y nuestra
hermandad, hoy reivindicado por el inmenso esfuerzo de solidaridad
mutua que construimos venezolanos y cubanos.
Hace apenas unos días se firmaron 49
acuerdos para la integración del pueblo, de la sociedad y de la
nación cubana, con el pueblo, la sociedad y la nación venezolana
(Aplausos).
Frente al ALCA, que fue un aborto del
imperialismo que nació muerto este año 2005, los pueblos de la
América Latina resistimos y nuestra resistencia tuvo resultado:
el ALCA murió de resistencia de los pueblos.
Pero no basta solo la resistencia, es
tiempo de plantearnos la ofensiva, y el ALBA es el nacimiento de la
contraofensiva revolucionaria, patriótica de los pueblos de nuestro
continente; es el primer punto de referencia de lo que va a hacer la
humanidad en este lugar del planeta.
Hay que ver lo que se hace, hay que
verle los ojos a la solidaridad del pueblo cubano en los barrios y
campos venezolanos llevando vida; hay que ver lo que se ha hecho, pero
sobre todo hay que ver lo que está por hacer.
Los enemigos de nuestros pueblos son
los mismos: de ayer, de hoy y del mañana.
Nuestro pueblo fue conmovido hace 30
años —éramos apenas unos niños algunos de nosotros—, pero
recordamos el dolor cuando en octubre de 1976, hombre y mujeres
cubanos y de este continente, fueron objeto del brutal y criminal
ataque terrorista contra un avión de Cubana de Aviación. No hemos
olvidado y creemos que —como dice la consigna— "la humanidad
tiene ansias de justicia", y no tenemos duda de que vamos a
lograr la justicia.
La semana pasada el Tribunal Supremo de
Justicia de la República Bolivariana de Venezuela inició los pasos
legales, para solicitar la extradición del criminal Luis Posada
Carriles de territorio norteamericano (Aplausos). Vamos a ver cuál va
a ser la respuesta de este gobierno: si ampara a los terroristas y
criminales o, sencillamente, cede a la justicia.
Tenemos por delante una gran jornada el
pueblo de Cuba, el pueblo de Venezuela y los pueblos de
América Latina, de Estados Unidos y del mundo. Nosotros
asumimos el reto, vamos a dar a la batalla porque se sepa la verdad
del terrorismo aplicado por Luis Posada Carriles, de los intereses que
ha representado, de quién lo ha financiado, de quién lo dirige, de
quién lo ampara. ¡Vamos a dar la batalla por la justicia!
¡Cuente el pueblo de Cuba con que las
instituciones y el pueblo de Venezuela vamos a dar la batalla hasta el
último aliento, hasta que logremos la victoria de la justicia frente
al terrorismo! (Aplausos.)
En este tiempo de esperanzas, en este
tiempo de construcción de lo nuevo, nosotros les dejamos al
Comandante Fidel Castro, al pueblo de Cuba todo nuestro amor,
toda nuestra voluntad y todo nuestro compromiso de que esta joven
Revolución Bolivariana seguirá caminando abrazada, de hermandad y de
amor, con el pueblo y la Revolución Cubana.
¡Que viva el pueblo de Cuba!
(Exclamaciones de: ¡Viva!")
¡Que viva el pueblo de Venezuela!
(Exclamaciones de: ¡Viva!")
¡Que vivan América Latina y el
Caribe! (Exclamaciones de: ¡Viva!")
¡Que viva el Comandante
Fidel Castro! (Exclamaciones de: ¡Viva!")
¡Que viva el presidente
Hugo Chávez! (Exclamaciones de: ¡Viva!")
¡Hasta la victoria siempre!
(Aplausos y exclamaciones de:
"¡Cuba y Venezuela, una sola bandera!")