¡Cuidado con el Sol!
Melanoma
JOSE A. DE LA OSA
El melanoma es un tumor maligno de la piel, y proviene de melanocitos que han sufrido degeneración maligna. Con esta sentencia inicia su diálogo para esta Consulta el doctor Lorenzo Anasagasti Angulo, especialista de segundo grado en Oncología, Profesor Auxiliar, Investigador Agregado y vicedirector del Instituto de Oncología y Radiobiología (INOR), quien es miembro también del Servicio de Tumores Periféricos de esa prestigiosa institución habanera.
Profesor Lorenzo Anasagasti Angulo.
Precisa que los melanocitos son células originarias del sistema nervioso que durante el desarrollo embrionario se sitúan en la capa basal de la piel. Su función es producir el pigmento llamado melanina que colorea la piel y brinda protección contra las radiaciones solares.
Es una enfermedad poco frecuente, subraya mi entrevistado, pero de gran importancia ya que de no ser diagnosticada en sus inicios y tratada adecuadamente puede provocar la muerte. En general, no se observa en niños, aunque puede encontrarse en adolescentes y adultos.
—¿Conoce la ciencia las causas que pueden desencadenar esta enfermedad o, al menos, sus factores de riesgo principales?
— En nuestro medio el principal elemento desencadenante es la exposición incontrolada y excesiva a las radiaciones solares, y esto unido a un tipo de piel blanca de poca resistencia a la insolación. También se plantea como factor de riesgo la insolación con quemadura de segundo grado, es decir cuando se cae la piel superficial, sobre todo en la infancia.
—¿El melanoma puede aparecer en cualquier lugar del cuerpo, tanto en el hombre como en la mujer?...
—Sí, y en orden de frecuencia se presenta en extremidades, tronco, cabeza y cuello. Se forma a partir de un nevo o lunar preexistente que se transforma o aparece como una lesión nueva que crece con relativa rapidez en pocos meses.
—Podría precisar cuáles son sus características principales?
—Este tumor se caracteriza por tener un tamaño mayor de 4 milímetros, que crece, es asimétrico, con bordes irregulares, y tiene una variedad de color, entre carmelita claro, oscuro y negro, y puede aparecer ulceración o un nódulo en su superficie. En ocasiones las células del tumor llegan a un grado tal de indiferenciación que ni siquiera producen el pigmento. En su evolución continúa el crecimiento y pueden aparecer otras lesiones tumorales alrededor de la lesión primaria, con aumento de tamaño de ganglios linfáticos en la región más cercana al sitio de origen del tumor. En momentos más avanzados de la enfermedad puede haber extensión a otros órganos.
—Una precisión: ¿aparece exclusivamente en la piel o puede manifestarse igualmente en una región mucosa?
—Aparece raramente en mucosas de labio, genitales y conjuntiva ocular.
—¿Cuál es la razón por la que debe consultarse con urgencia al médico?
— Atendiendo a que los resultados del tratamiento son mejores mientras más temprano se realice el diagnóstico. En ocasiones, y a pesar de que esta es una enfermedad que dada su naturaleza el paciente puede apreciar su evolución, no se acude de inmediato al médico y se deja evolucionar con la falsa creencia de que "no tiene importancia" o que "permanecerá igual y no avanzará".
—¿Qué procederes diagnósticos se emplean para la confirmación del melanoma?
— El principal es el interrogatorio al paciente para conocer la evolución de la lesión, la observación clínica de sus características y el examen físico en la búsqueda de signos de extensión de la enfermedad. Luego de la extirpación, el estudio anatomopatológico de la pieza quirúrgica es imprescindible para hacer un pronóstico preciso y completar el tratamiento.
—¿En qué consiste el tratamiento? ¿Tiene cura o tienden a reaparecer?
— El tratamiento es la cirugía. La lesión debe ser extirpada en profundidad y abarcando tejidos sanos a su alrededor, para lograr el margen de seguridad necesario. Si la intervención se realiza bien, generalmente la lesión no reaparece en el sitio de origen, aunque sí pueden aparecer las metástasis que pudieran estar diseminadas desde el momento en que el tumor primario tuvo vasos sanguíneos propios.
—En general, ¿cuál es el pronóstico de esta enfermedad?
—Cuando el tumor es in situ, es decir, permanece en la capa más externa de la piel, la curación es del 100%. Ahora bien, como ocurre con la mayoría de los tumores, mientras más avanzada se diagnostique la enfermedad, los resultados terapéuticos serían entonces menos alentadores.
—¿Existen métodos de prevención en el tema que nos ocupa?
— Sí, el principal es la protección contra la radiación solar excesiva. También el autocuidado de nuestra salud y el conocimiento que debemos tener acerca de este tipo de lesión, a fin de acudir al médico con presteza.
—Usted decía al inicio, Profesor, que es una enfermedad poco frecuente. ¿Cuál es su incidencia?
—En Cuba se diagnostican unos 200 casos al año. En el mundo se advierte últimamente un crecimiento marcado en la incidencia de este tumor.