Migraña infantil
JOSÉ A. DE LA OSA
Con capacidad limitada para describir sus síntomas, la presencia clínica de la migraña en los niños resulta difícil de establecer, atendiendo además a que este es un trastorno constituido por una variedad de síntomas y alteraciones físicas.
Doctora Elina Ceballos Villalón.
Mientras me preparaba para esta entrevista con la doctora Elina Ceballos Villalón, especialista de primer grado en Pediatría, dedicada a la Neuropediatría en el Hospital Pediátrico Docente Juan Manuel Márquez, de Marianao, leí un relato de un neurólogo infantil quien al ofrecer atención a una niña de 5 años con diagnóstico presuntivo de migraña, esta le refirió con particular precisión: "La cabeza me hace como si tuviera el corazón latiendo adentro".
¿Ese es el síntoma principal de la migraña? Es el dolor de cabeza, precisa mi entrevistada, acompañado de otros signos y síntomas: palidez, sudoración, frialdad, molestias a la luz (fotofobia) y al ruido (fonofobia), entre otros. Definir las características del dolor tipo migraña es muy importante; es pulsátil, hemicraneal (dolor en un lado de la cabeza) y más frecuentemente aparece en la tarde y dura horas.
— ¿Qué diferencias existen, atendiendo a sus manifestaciones, entre cefalea y dolor de cabeza, jaqueca y migraña?
— No existen diferencias entre cefalea y dolor de cabeza, son dos maneras de expresar un mismo padecimiento. Lo mismo sucede con jaqueca y migraña: este último es la terminología médica para ese tipo de dolor de cabeza, que en la población se conoce como jaqueca.
— ¿Qué conoce la ciencia en cuanto a las causas que originan la migraña y qué interrogantes se abren aún?
— Es una enfermedad de carácter familiar. Hasta el 80% de los pacientes tienen antecedentes familiares de migraña. Aunque las causas no han sido bien definidas, sí se conoce que existen factores precipitantes como son algunos alimentos: chocolates, frutos secos, cafeína, queso, cítricos, leche, alcohol, conservas; y también el ejercicio físico, el ayuno, alteraciones en el ritmo de sueño, la tensión escolar o familiar.
— En general, ¿a qué edad se inician las crisis de migraña?
— Pueden comenzar en la edad preescolar, pero más frecuentemente aparecen en la escolar, adolescencia y juventud.
— ¿Ante qué manifestaciones debemos consultar al médico?
— Siempre que aparezca el dolor de cabeza, a fin de definir qué estudios se deben realizar para llegar a diagnóstico. Cuando en un niño los episodios de dolor se hacen muy frecuentes, ellos interfieren en su vida diaria.
— A propósito, ¿qué áreas de sus vidas se pueden ver afectadas con esta dolencia?
— Fundamentalmente la relación con otros niños, pues se limita el juego, además que les dificulta la asistencia a la escuela, el rendimiento escolar y sus actividades habituales.
— ¿Los dolores migrañosos son variables en cuanto a intensidad, frecuencia y duración?
— Sí, varían de una persona a otra y dependen mucho del conocimiento o entrenamiento que se tenga para prevenir la crisis, al reconocer aquellos factores que puedan desencadenar el episodio de dolor y poder evitarlos.
— ¿Tiene tratamiento específico? ¿Se cura o solo es controlable?
— La migraña no tiene tratamiento curativo. Existen medicamentos que pueden abortar las crisis, como los analgésicos y antihistamínicos (sin abusar de ellos porque pueden provocar dependencia o dolor de rebote). Hay asimismo tratamientos profilácticos o de intercrisis, que permiten que las crisis no sean muy frecuentes. Pero lo más importante en el control de la migraña es que el niño y su familia conozcan los factores precipitantes y los eviten, lo que posibilita espaciar los episodios de dolor.
— ¿Suele ser más frecuente en el sexo masculino o en el femenino? ¿Hay alguna diferencia entre etnias?
— En la edad prepuberal aparece por igual en niños y niñas. Sin embargo, en la adolescencia y adultez es más frecuente en el sexo femenino. No existen diferencias entre etnias.
— ¿Se conoce con exactitud la prevalencia de la migraña infantil en nuestro medio?
— De acuerdo con la literatura mundial, entre el 1-4% de los niños y niñas pueden padecer de migraña. Después de la primera menstruación es más frecuente en el sexo femenino (6%) que en los varones (3.5%).
— Dejo abierta esta última pregunta por si usted desea formular alguna precisión o recomendación.
— Es importante conocer que la migraña es causa muy frecuente de consulta en la infancia, que es benigna y cuando se lleva un estilo de vida saludable se logran espaciar notablemente los episodios de dolor para que el niño pueda realizar sus actividades sin limitaciones.