KAWASAKI
Descrita por primera vez en el mundo hace 34 años por un japonés —por eso lleva su nombre—, la enfermedad de Kawasaki tiene una incidencia universal.
Científicos de muchos países del mundo, y también de Cuba, investigan sobre esta entidad y piensan en ella sobre todo cuando llegan a la consulta niños con afecciones que se acompañan de erupciones cutáneas, como sucede con la escarlatina, sarampión, rubéola, mononucleosis...
Aunque todo hace indicar hasta hoy que es una afección poco frecuente, lo importante de tenerla en mente se deriva de que puede comportar, como secuela, trastornos cardíacos en una de cada cinco personas que la padece, que son prevenibles con un diagnóstico certero y a tiempo.
Esto motiva el diálogo con la doctora Josefina Quintero Arenas, pediatra del hospital Juan Manuel Márquez, de Marianao, en Ciudad de La Habana, quien participa en un proyecto de investigación sobre la enfermedad de Kawasaki en esa institución capitalina.
—¿Es posible, doctora, diagnosticar por el examen clínico un Kawasaki, o se demanda de análisis complementarios?
—El diagnóstico es eminentemente clínico, y puede ser apoyado por exámenes que no son específicos de esa entidad.
—¿Podría señalar sus signos y síntomas principales?
—Fiebre persistente durante unos cinco días, enrojecimiento e inflamación de manos y pies; descamación de la piel en la punta de los dedos y erupción o rash que adopta diferentes formas. También puede haber enrojecimiento de los ojos, sin acompañarse de secreción; enrojecimiento de la lengua y fisuras y enrojecimiento de la boca, inflamación de los ganglios cervicales, generalmente unilateral. Es importante subrayar que existen formas de Kawasaki atípicas que, aunque no están presentes algunos de los elementos referidos, con el auxilio de un Ecocardiograma se puede observar la dilatación de las arterias coronarias, lo que confirma el diagnóstico de la afección.
—¿En qué edades aparece generalmente esta enfermedad?
—En los primeros años de vida. Más del 80 por ciento de los casos se produce en niños menores de 5 años, y la incidencia máxima ocurre entre uno y dos años.
—¿Se conoce el agente infeccioso causante del Kawasaki?
—Se desconoce aún. Se plantea que pudiera ser un agente infeccioso.
—¿Cuántos días dura como promedio la enfermedad?
—Cursa en tres fases: aguda, subaguda y la convalecencia, por lo que, sumadas, oscila entre 20 y 60 días.
—¿Aparece en épocas determinadas del año?
—No se ha podido demostrar, pero se han visto epidemias en Japón, Estados Unidos y otros lugares del mundo que podrían tener un carácter estacional.
—¿Se conoce la frecuencia en nuestro país?
—Hasta el momento no existen estudios que indiquen su incidencia nacional.
—¿Es más común en el sexo masculino que en el femenino?
—Tiene un predominio por el sexo masculino: de 1,5 a 1.
—¿Y en cuanto a las etnias?
—Se ha descrito en todas las razas.
—¿Tiene tratamiento específico?
—Como enfermedad inflamatoria se establece tratamiento antinflamatorio, por lo que generalmente se indica aspirina y la gammaglobulina hiperinmune que previene la complicación más temida: los aneurismas (dilatación) en las arterias coronarias.
—¿Alguna recomendación en especial a sus colegas médicos, y en especial a padres y familiares de estos pacientes?
—La necesidad de continuar profundizando en el estudio de esta enfermedad relativamente "joven" a fin de realizar el diagnóstico correcto y evitar complicaciones. Y conocer que de haberse generado dilataciones en las arterias coronarias, pueden desaparecer con posterioridad, como se ha visto en seguimientos especializados a estos pacientes. (2001)