Consultas  Médicas

 

Diabetes insípida

JOSÉ A. DE LA OSA
delaosa@granma.cip.cu

Esta semana pregunté al doctor Arturo Hernández Yero si la diabetes insípida y la diabetes mellitus guardan alguna relación. El especialista del Instituto de Endocrinología, profesor e Investigador Auxiliar, indicó: Son dos entidades diferentes que solo tienen en común la palabra diabetes y que las personas con estos padecimientos orinan mucho e ingieren grandes cantidades de líquidos, sobre todo agua.

Foto: CaoDoctor Arturo Hernández Yero.

La llamada "insípida" (sin sabor) es debida a una deficiencia de la hormona antidiurética (vasopresina), encargada de reducir el volumen urinario, mientras la diabetes mellitus se produce por una insuficiente producción de insulina por el páncreas.

En fecha tan lejana como 1679 el médico Thomas Willis, en Inglaterra, fue el primero en identificarlas. Humedeció su dedo en la orina de un paciente y comprobó que tenía sabor dulce; en otro, no tenía ningún sabor. Estableció entonces los términos de diabetes mellitus y diabetes insípida para diferenciarlas.

Doctor Hernández Yero, ¿son conocidas las causas que pueden originar la aparición de una diabetes insípida?

Esencialmente por lesiones quirúrgicas o traumas en la región del hipotálamo y la hipófisis. Con menor frecuencia por tumores en esas áreas del cerebro, trastornos vasculares, enfermedades inflamatorias o infiltrativas y raramente por herencia familiar. También por procesos autoinmunes y causas idiopáticas (desconocidas). Se identifica una forma clínica, de menor frecuencia e intensidad, en que la causa es de origen renal.

Hipotálamo e hipófisis: ¿podría aclararnos las funciones de esas estructuras cerebrales?

Ambas conforman una unidad anatómica y funcional que establece el vínculo fundamental entre el sistema nervioso central y el endocrino. El hipotálamo se encarga de regular los estados de ánimo, ritmos biológicos, sexualidad, el hambre, la sed, entrada y salida de líquidos, la temperatura corporal y reacciones de defensa; mientras que la hipófisis es la principal glándula endocrina que controla el crecimiento y rige el funcionamiento de las otras glándulas que producen hormonas en el organismo.

¿Se conoce cuál es su frecuencia en Cuba y otros países?

Es una enfermedad poco frecuente, aunque no contamos con estadísticas. En algunos países se señala una prevalencia de un paciente por cada 60 000 habitantes.

¿A qué edades como promedio suele manifestarse? ¿Aqueja por igual a ambos sexos?

Se presenta a cualquier edad en dependencia de la causa que la origine. Afecta por igual a ambos sexos, aunque en las de causa desconocida, en la infancia existe una ligera mayor frecuencia en los varones.

¿Cuáles son en general sus principales síntomas?

La sed excesiva y el aumento en la frecuencia al orinar, que puede presentarse en forma gradual o súbita. Las personas con diabetes insípida necesitan beber líquidos con frecuencia para compensar las pérdidas por la orina y no deshidratarse. Hay pacientes que llegan a orinar entre 10 y 20 litros en 24 horas.

¿Qué procederes se emplean para el establecimiento del diagnóstico de certeza?

La clínica principalmente y el control de los líquidos ingeridos y la orina en el día, con la medición de su densidad. Confirmar que el paciente orina más de tres litros en 24 horas con baja densidad urinaria establece el diagnóstico presuntivo de la presencia de una diabetes insípida, que se corrobora con una prueba de restricción de líquidos.

¿Cuál es la terapéutica que se emplea?

El tratamiento consiste en administrar el acetato de desmopresina (un sustituto de la hormona antidiurética vasopresina) en atomización por vía nasal o en tabletas orales.

¿Es curable o solo controlable?

Existen formas clínicas transitorias de esta dolencia que se curan completamente. Las que se establecen de forma permanente son de fácil control mediante el cumplimiento estricto de las indicaciones médicas.

¿Qué conducta, en sus hábitos diarios de vida, deben seguir las personas con esta dolencia?

Es una enfermedad controlable sin grandes dificultades, que, una vez lograda la normalización del balance hídrico con un tratamiento adecuado, no limita en lo más mínimo el desempeño normal de la vida de estos pacientes.