RÍO
DE JANEIRO.— En partido que nada tuvo que ver con el jugado por Cuba ante
Brasil en la ronda eliminatoria, las anfitrionas de estos XV Juegos
Panamericanos derrotaron inobjetablemente a las antillanas y con ese
triunfo alcanzaron la medalla de oro de la justa, dejando en plata a sus
oponentes.
Un cerrado duelo, con marcador de 32-28 fue el resultado,
también favorable a las locales en las preliminares, sin embargo el 30-17
de ayer en la mañana mostró a las auriverdes con el mismo nivel, pero muy
inferiores a las cubanas, sobre todo en el aspecto ofensivo.
Por ejemplo el por ciento de efectividad no rebasó el 40
por ciento, en tanto el de sus rivales se mantuvo igual al desafío
anterior, 63. Es cierto, que la defensa trabajo mejor, pero se gana
anotando goles.
De cualquier forma esta ha sido una destacadísima actuación
para las muchachas de Senobio Maturell, pues sin jugar internacionalmente
por más de seis años no se puede derrotar una selección como la brasileña,
que obtuvo aquí su tercera corona consecutiva en Juegos Panamericanos.
Pese a la falta de encuentros de las cubanas, es justo
apuntar que esta es la mejor actuación de la mayor de las Antillas en estas
fiestas multideportivas del continente. Lo mejor hasta el momento era la
medalla de bronce alcanzada en Winnipeg, en 1999.