RÍO DE JANEIRO. — Las dos "espadachinas" cubanas, Eimey Gómez y Zuleydis
Ortiz, no pudieron imponerse en el cuadro de ocho de los XV Juegos
Panamericanos, este martes aquí, y quedaron eliminadas del ansiado reparto
de las cuatro medallas.
Goméz (número 51 del ranking mundial) llegó a estar 10-12 debajo de la
estadounidense Courtney Hurley (14), luego apretó y se puso arriba por
13-12, pero una nueva reacción de su rival la dejó sin lograr el sueño de
reeditar el título que había ganado en Santo Domingo 2003.
Ortiz (33) se enfrentó a la canadiense Julie Leprohon (28), contra quien
estuvo en desventaja a la largo del combate. Las esperanzas se despertaron
cuando se puso a un toque (9-10), aunque enseguida la norteña también
resultó capaz de lograr el repunte.
"Fueron combates que se pudieron ganar", me comentó afligido un
especialista cubano en el propio Centro de Convenciones.
Gómez, Ortiz y el entrenador Pedro Enrique Gómez se alejaron rápidamente
con la decepción pesando sobre sus espaldas.
Las cuatro medallistas, a medirse todavía para ver cuales son las dos
que discutirán el oro, son la colombiana Ángela Espinosa (69) y Hurley (14),
así como Leprohon y la sorprendente brasileña Clarise Menezes (146).
Y hay que apuntar, por cierto, que la de casa no creyó en el ranking,
pues su número es elevado, y entre sus victorias se cuentan la lograda ante
la venezolana María Martínez (45), por 15-13, y mucho más la conseguida
ante la canadiense Sherraine Schalm (7, la mejor ubicada en la citada lista
de la FIE), por 15-13.
La presea de la brasileña es la primera de una esgrimista de su país en
toda la historia de estos certámenes.
¿Se imaginan como se pusieron las gradas?
Cuba había ganado cuatro de las cinco ediciones en las que había sido
convocada esta especialidad, y es la primera vez en que se queda sin una
medalla.
Se trata de un podio en el cual no pudo entrar ninguna de las
medallistas de Santo Domingo 2003.