14 de julio del 2007
Por primera vez, mujeres a la palanqueta
Miguel Hernández y Raúl López, (foto), enviados especiales de Granma
RÍO DE JANEIRO.— Ya las mujeres no son convidadas de piedra en el reinado de los hombres del gimnasio. En el mundo, por ejemplo, desde hace 20 años compiten levantando pesos. Y en los Juegos Panamericanos comenzaron hace 8 años en Winnipeg.
Indira
Salinas.
Las cubanas debutan en el dominio de norteamericanas, dominicanas, colombianas, mexicanas y canadienses. Van perdiendo el miedo escénico sobre el piso de goma antideslizante sobre el que campean barras y mancuernas, cuyos estruendos estremecen el tablado y sorprenden de vez en cuando al visitante desacostumbrado.
Los futuros medallistas continentales, que comenzarán a aparecer a partir de hoy en uno de los pabellones del complejo Riocentro, a unos minutos a pie de la mesa de prensa, calentaron ayer los músculos en el mismo escenario. Gruñen y resoplan, hombres y mujeres, mientras levantan el peso, coro al que se unen también
las habaneras Edilia Amorós, Daymara Róvira y la camagüeyana Indira Salinas.
Salinas, 21 años y 75 kg , ya cuenta para los historiadores: es la primera chica cubana con medallas en un evento internacional con sus bronces en los Juegos del ALBA y sus platas en la Copa Simón Bolívar, todo el botín en Venezuela.
La simpática muchacha sueña con ser campeona olímpica o mundial, aunque alguien pudiera pensar en una "misión imposible".
"Tengo derecho a soñar". Por supuesto, pero aquí¼
"También tengo los pies en la tierra¼ Venimos a coger experiencia, a acostumbrarnos a este mundo de la alta competición, a medirnos con estas rivales de experiencia."
—¿Por qué entraste a las pesas?
"No me eran algo extraño. Yo era martillista."
—¿ Y qué me dices del tabú?
"¿Cuál tabú?"
—Bueno, que a las mujeres que levantan pesas se les atrofian los músculos...
"Eso es un cuento de caminos. Mírenos a nosotras. Y a muchas de las que están aquí. Mientras más se difunda nuestro deporte se eliminarán las expectativas erróneas. Muchas mujeres consiguen cuerpos más esbeltos con estos ejercicios."
El vaivén de licras pareció quebrar el cuello del intruso reportero esta mañana de gimnasio en el nuevo reino de las mujeres.