El boxeo abrazó su título 80
Ariel B. Coya, enviado especial
GUADALAJARA.—Casi, casi,
el boxeo cubano se vistió ayer de
oro puro en una demostración
inobjetable de su poderío, al
sumar por fin su título número 80
en estos Juegos, desde que en
Sao Paulo’63 alzara el primero.
Y si no rayó la perfección fue
porque a Yosvani Veitía (49 kg),
el zurdo espirituano, lo dejaron
en plata los jueces en una pelea
polémica, que aun habiéndola
ganado el anfitrión Joselito Velázquez,
nunca debió concluir
con un marcador tan desproporcionado
(20-12).
 |
Lázaro Álvarez y Roniel Iglesias. FOTOS: JUAN PABLO CARRERA,
ENVIADO ESPECIAL
|
 |
Quizá ante semejante incordio,
cualquier otro equipo se hubiera
visto fuera de sus casillas camino
a los duelos restantes, pero no
esta escuadra caribeña, cuyos muchachos hasta
entonces desconocían la mácula de la derrota. Tanta
juventud y talento rebosa.
Así trepó al ring a continuación el pinareño Lázaro
Álvarez (56), quien demostró a puño limpio por qué
ha sido este año el primer campeón mundial de
Cuba. Silenció a la afición enardecida en la Expo
Guadalajara y superó 19-15 al también mexicano
Óscar Valdez —bronce del orbe en Milán’09—, a
pesar de su mayor experiencia, para inaugurar la
estela dorada de la mayor de las Antillas.

Emilio Correa.
“Confié en mis fuerzas, porque tenía que lograr
esta victoria y confié en la escuela cubana de boxeo,
que me ha entrenado para ganar siempre”, dijo al término
de la pelea, cuando ya Roniel Iglesias (64)
escalaba al cuadrilátero.
Y tampoco falló su coterráneo, que desde el mismo
gong inicial arrolló al bahamés Valentino Knowles,
para terminar imponiéndose sobradamente (22-14):
“Una victoria para quienes sufrieron conmigo la
derrota del Mundial de Bakú. Así que ya solo pienso
en ponerle el broche de oro con la Olimpiada de
Londres”.

Lenier Peró.
Le llegó el turno a Emilio Correa (75) y el hijo volvió
a ser como el padre. Un ciclón entre las cuerdas.
Apabulló 18-6 al ecuatoriano Jaime Cortez, que un
año atrás le había arrancado en Quito la corona del
continente.
“Desde antier había planificado muy bien la pelea.
Mi entrenador me insistió para que no me regara
durante el combate y es por eso que el resultado fue
tan holgado”, confesó el más veterano de la bisoña
escuadra que revalidó su presea de Río de
Janeiro’07.
Faltaba solo entonces el camagüeyano Lenier Peró
(91), el exjuvenil monarca olímpico de Singapur’10, y
no defraudó. Batió 16-10 al también ecuatoriano
Julio César Castillo y se convirtió en el histórico
dueño del título número 80. Con la guardia en alto y
una pegada casi perfecta, el boxeo cubano se bañó
|