Fuertes jornadas en pesas y lucha

Harold Iglesias Manresa, enviado especial

GUADALAJARA.—Apesar de la garra, la determinación y la entrega en la plataforma del CODE Paradero y en la arena del CODE II, el oro les resultó esquivo al pesista Bredni Roque (69 kg) y a los tres luchadores del estilo libre.

Yunierki Blanco quedó a un paso del primer lugar. FOTO: RICARDO LÓPEZ HEVIA

“Bredni dejó alma, corazón y vida, pero hace dos meses viene arrastrando una lesión en las articulaciones de su rodilla. Estaba diseñado que levantara entre 138-140 en el arranque y entre 176-178 en el envión. No esperábamos irnos sin medallas, ahora tenemos el mundial dentro de 15 días, allí saldrá a buscar la clasificación olímpica y los puntos necesarios para el equipo”, sentenció el entrenador principal Jorge Luis Barcelán.

A punto de escalar el podio estuvo el pinareño de 23 años, finalmente cuarto con 309 (138-171), en una división dominada por el venezolano Israel Rubio 318 (145-173).

“Fue una final muy tensa, todos pidiendo kilogramos desde el cuarto de calentamiento, pensé que podía remontar la desventaja del arranque, pero me faltó el oxígeno después del clean producto de tener, además, los vendajes muy ajustados”, manifestó entristecido el cuarto hombre mundial de envión en Antalya’10.

Tampoco se escuchó el Himno Nacional en los colchones de la lucha libre CODE II, donde Yunierki Blanco (74 kg) cedió ante el monarca universal Jordan Burroughs por idénticos 3-2.

“Estaba en perfectas condiciones físicamente. En el segundo tiempo me apresuré faltando 30 segundos y ahí me ganó la pelea; antes de Londres, o allí mismo si nos enfrentamos otra vez, cambiaré la historia”, afirmó seguro el holguinero de 24 abriles.

“Teníamos un plan táctico de pelear pegados, sin ceder el agarre de brazos, para que no intentara tacklear. Es un luchador muy rápido, en excelente forma y Blanco se descuidó estando delante y con 30 segundos para concluir”, argumentó su mentor Julio Mendieta.

A Youli Bonne (60) la confianza excesiva le pasó factura ante un Franklin Gómez totalmente impecable, al punto de coronarse sin permitir puntos. El puertorriqueño dejó al nuestro en bronce.

El otro cubano, Michel Batista (96), perdió en su primer combate ante el canadiense Khetag Pliev.

A pesar del cierre aciago, Cuba ganó la disciplina con nueve títulos.