GUADALAJARA.—Yipsi
Moreno no es de las atletas conformes con el mínimo; ella siempre
quiere lo máximo y en Guadalajara 2011, sus últimos Juegos
Panamericanos, lo que confiesa casi saltándosele las lágrimas,
quería despedirse por lo alto.
"Estaba disgustada conmigo misma por las faltas cometidas. Y si
no me hubiera disgustado, si no hubiera estado inconforme todo el
tiempo, aunque la victoria parecía segura, no habría logrado el
lanzamiento récord que al fin conseguí en el último momento",
confesó en tono confidencial casi en un susurro.
"Estoy muy contenta, satisfecha a plenitud", no se cansaba de
repetir a los periodistas, "le agradezco a todo el mundo, a mi mamá,
a mi esposo Abdel Murguía, a mi entrenador Eladio Hernández, al
INDER, a todos los que me quieren y apoyan que son muchos. Lo dedico
a todos ellos también, a mi hijo Abdelito, al pueblo, al Comandante
Fidel"…
La camagüeyana deja sin duda una huella indeleble en la historia
del atletismo. Es su tercer título consecutivo en Juegos
Panamericanos (con un sobresaliente nuevo primado de 75.62) y su
cuarto podio, pues comenzó plateada en Winnipeg 1999.
En
esos 12 años también conquistó el cetro mundial dos veces (2001 y
2003) y quedó subtitular otras dos (2005 y 2007). Por si fuera poco,
exhibe en sus vitrinas dos medallas olímpicas de plata en Atenas
2004 y Beijing 2008 y después de la maternidad volvió al deporte
competitivo porque se prometió a sí misma luchar por el más preciado
laurel olímpico en los que serán sus cuartos Juegos, los de Londres
2012, tras clasificar a las puertas del podio durante su debut en
Sydney 2000.
Podrá alcanzarlo o no, como bien reconoce, y otras conseguirán
lanzar más lejos que ella el pesado martillo, más ninguna en el
planeta ha sido capaz de mantenerse a tan alto nivel competitivo
durante tantos años.
Reboza de satisfacción por haber logrado su lanzamiento mejor del
año y por cumplir con el objetivo de la delegación; responde que
efectivamente existe una buena camaradería entre las martillistas y
que la flamante instalación panamericana le pareció buena, no
obstante el retraso en su terminación: "la gente aquí es muy amable
y competí como en casa", aseguró.
Y después de tantos años dándoles satisfacciones a los
aficionados y a todo el pueblo cubano, ¿no piensas en que tu
ausencia creará un enorme vacío?
"Para mi también será difícil la partida, pero prefiero que
recuerden a Yipsi en su plenitud, victoriosa, para nada con otras
medallas o figurando en lugares fuera del podio. Mi meta ahora es
Londres, motivada al máximo por Guadalajara 2011. Luego vendrá el
otro adiós.