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Pese a la amenaza de Jova

Guadalajara quiere anotarse la primera medalla

Ariel B. Coya, enviado especial
arielbcoya@granma.cip.cu

GUADALAJARA.—Cada vez más cerca del día D y la hora H (el viernes 14 a las 8:30 p.m., hora local), Guadalajara es una auténtica verbena. Los XVI Juegos Panamericanos, y su fiesta, impregnan toda la ciudad y no hay valla publicitaria que no aluda al evento con la leyenda "Estamos listos".

Los cubanos ya disfrutan de la Villa.

Una decena de pelotas de béisbol, baloncesto y fútbol, floretes de esgrima, un volante de badminton y guantes de boxeo de hasta cinco metros de alto pueden apreciarse en diversos puntos, mientras en las avenidas pestañean sin cesar los colores panamericanos adheridos a las carrocerías de los autos, y en las plazas y edificios flamean mantas enormes con imágenes de atletas mexicanos.

No hay atajos pues, para aquel al que el deporte le haga sentirse un marciano. Y no hay taxista, transeúnte o lugareño que evite el interrogatorio: "¿De Cuba... Son de Cuba? Bienvenidos". La delegación de la Isla tiene gancho, mucho gancho, y nadie duda que en estos Juegos volverá a tener una fuerte dosis de protagonismo. Tan amables y hospitalarios resultan los anfitriones por estos lares y tan jovial la atmósfera que se respira para recibir a casi un millón de turistas, aunque arriba, en lo más alto, el cielo no deje de lucir encapotado.

De hecho, preocupa un poco el paso del huracán Jova, que se esperaba tocase tierra ayer martes, tras haber cobrado fuerza en el océano, si bien las autoridades cruzan sus dedos y confían en que al final el meteoro no les agüe la fiesta.

"Esperemos que no llueva mucho. En los últimos días se dijo que sería muy fuerte y no fue así", afirmó el director del Comité Organizador, Carlos Andrade, quien explicó que en un "caso extremo", la ceremonia inaugural en el Estadio Omnilife "podría ser acortada" si la lluvia se intensifica sobre la capital de Jalisco.

La subsede de la ciudad balnearia de Puerto Vallarta, que acogerá las competencias de voleibol de playa, velas y triatlón, sería la principal afectada por el huracán, al encontrarse en el radio donde Jova impactaría, por lo que, entre otras medidas, se ordenó la colocación de sacos de arena en el estadio del voli playero. "Tomamos la precaución de hacer una barrera por si sube la marea, si no llueve, pues no pasa nada", dijo Andrade, mientras Guadalajara y su gente trabajan a marchas forzadas para entregar las seis sedes que faltan. La cuenta regresiva no se detiene.

 

 

 

 

 

 

Equipo de Ediciones Digitales de Granma
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