Villa le
devolvió la fe a España y están en cuartos
Ciudad
del Cabo.— España se clasificó hoy para los cuartos del final del
Mundial al vencer por 1-0 a Portugal gracias a un gol de David
Villa, que rentabilizó la paciencia y la apuesta ofensiva de su
equipo.
Portugal apenas propuso un muro
defensivo y España tuvo que remar río arriba durante todo el
encuentro. Esta vez el fútbol premió a quien más quiso jugar y el
campeón de Europa se medirá a Paraguay en la siguiente ronda.
España se encontró con el mismo
partido que ante Suiza; es decir, necesidad de atacar sin descanso e
infinitos golpes contra un muro.
Portugal propuso un "trivote" en la
medular, con tres jugadores defensivos, pero en realidad se cerró
con muchos más jugadores. Casi por verg enza, como disimulando, dejó
a Cristino Ronaldo descolgado.
El equipo de Vicente del Bosque
comenzó con vigor, como si fuera consciente del encuentro que le
esperaba. Movía bien ante el repliegue local y le alcanzaba para
generar ocasiones. Fernando Torres y David Villa probaron tres veces
al arquero Eduardo en los primeros siete minutos.
A Carlos Queiroz, el técnico
portugués, le entró el disgusto y ordenó juntar a centrocampistas
con defensas. Poco le agradó a Cristiano Ronaldo, que se pasó medio
partido pidiendo a sus compañeros que salieran de la cueva. Pero no
le hicieron mucho caso.
Con el paso de los minutos, España
comenzó a desesperarse antes de tiempo. Luego lo corregiría. Además,
en esos momentos "la roja" echaba en falta la inspiración individual
de algunos de sus futbolistas más importantes, como Torres o Andrés
Iniesta.
Portugal pasó a sentirse cómodo
defendiendo con nueve jugadores y hasta se permitió el lujo de
probar a Iker Casillas con un disparo de Tiago que el arquero
español rechazó con apuros.
España se fue al descanso con la
misma desesperación que ante Suiza y con la necesidad de encontrar
soluciones más efectivas que entonces.
Encontró
una magnífica con Fernando Llorente en una decisión valiente de Del
Bosque. El seleccionador quitó del campo a un desafortunado Torres
-una noche más- y puso al fornido punta del Athletic de Bilbao. Era
una forma de facilitar formas diferentes de llegar al área. Gran
remedio para "la roja".
Además, España probaba otra vez con
la paciencia, una receta imprescindible para la propuesta que ofrece
este equipo.
Y el gol llegó a los 63 minutos. Xavi
encontró un hueco en mitad del muro rival, tiró un taco hacia Villa
y éste necesitó dos remates para superar a Eduardo. Lo venció con el
segundo para situar la ventaja española y lograr su cuarto tanto en
este Mundial.
A Portugal ya no le servía con
acampar cerca de su arco.
Necesitaba más, algo de ambición,
siquiera un poco. Justo lo que esperaba España para afianzar su
fútbol de toque. Así llegó una clara ocasión de Sergio Ramos, quien
obligó a Eduardo a realizar una fantástica intervención.
En los minutos finales, Xavi pasó a
dominar la escena, a bailar en el centro del campo con el balón
pegado al pie. Y cuando eso sucede, España suele convertirse en un
equipo superlativo. De nuevo, España demostró que tener el balón es
la mejor defensa posible.
La campeona de Europa justificó hoy
por qué es una de las grandes favoritas para ganar el Mundial. Lo
hizo agarrado a la paciencia, la pelota y el talento de Villa.
Suficiente para derribar a Portugal, que sólo opuso un muro. España
vuelve a pisar fuerte. (DPA).