Uruguay
con un solitario gol venció a México y quedó como primero del grupo
A, el Tricolor también está clasificado a octavos de final.
Aquellos que creyeron que el empate entre México y
Uruguay estaba pactado, se habrán quedado átonos al ver que estas
selecciones salieron con furia a luchar por la victoria.
Los equipos latinoamericanos presentaron un juego
agresivo, dispuesto a quebrar las redes contrarias con el fin de
lograr la clasificación a octavos conquistada, a la postre por
ambos.
La victoria de Uruguay sirvió para que pasaran a la
siguiente fase como cabezas de grupos, dando muestras de su
superioridad defensiva, en un periplo en el que no recibieron goles.
El Tri salió esta vez con Cuauhtémoc Blanco como
capitán y guía principal del ataque azteca, el cual probó al portero
Muslera durante la mayor parte de la primera mitad. Así los
mexicanos cobraron protagonismo y dominaron sobre la grama pero sin
suerte de cara al gol.
La oportunidad más clara de México llegó con un
fulminante disparo de Andrés Guardado que se estrelló contra el
travesaño para ahogarle el grito del gol al centrocampista del
Deportivo de España.
Así continuaban los desbordes y los mexicanos se
adueñaban del centro del campo hasta que en el minuto 43' el matador
Edison Cavani fabricó una jugada de derecha y saco un zapatazo al
corazón del área para que el cañonero de la Liga Holandesa, Luis
Suárez empujara el balón con la testa al final de los tres palos. El
festejo charrúa no se hizo esperar.
En el complementario La Celeste salió mucho más
apabullante. El once mexicano mostró síntomas de nerviosismo y en
más de una ocasión la segunda anotación uruguaya estuvo cerca de
llegar.
El DT Javier Aguirre, ni corto ni perezoso, apostó
sus tres cambios y metió en juego a Israel Castro, Pablo Barrera y
Javier "el chicharito" Hernández, quienes se asistieron varias veces
pero de manera fallida. A esto se unieron los chances perdidos por
Francisco Rodríguez y los resbalones de Giovanni Dos Santos en el
área chica.
Al final el gol tricolor nunca llegó y los aztecas
tuvieron que esperar al término del choque entre Francia y Sudáfrica
para respirar en octavos.
Un partido en el que México puso la música y los
bailarines pero Uruguay se coló en la fiesta y se llevó el premio
mayor.
Los equipos latinoamericanos continúan dando la hora
y colándose donde nadie los pensaba, esto es una demostración más de
la calidad de nuestro fútbol.