La
selección paraguaya de fútbol consiguió un triunfo justo
ante Eslovaquia aunque el marcador 2-0 es un poco exiguo
teniendo en cuenta que nunca fue amenazado por el conjunto
rival y dominó casi todo el partido, dijo el entrenador
Gerardo Martino.
Paraguay se impuso y quedó en lo más alto
del Grupo F, extendiendo su gran inicio en la Copa del Mundo
tras el empate 1-1 en el debut ante Italia.
Con el triunfo, Paraguay suma cuatro puntos
y lidera la zona en solitario a la espera del partido que
Italia jugará más tarde el domingo ante Nueva Zelanda.
"El partido lo ganamos bien, lo manejamos en
casi toda su extensión. En el primer tiempo pudimos sacar
una ventaja mayor", dijo Martino en rueda de prensa tras el
encuentro.
"Deberíamos haber aprovechado la situación
en un partido sin riesgos para marcar más goles", destacó el
entrenador.
La "albirroja" se impuso con un tanto de
Enrique Vera a los 27 minutos y otro de Cristian Riveros a
los 86.
Paraguay manejó el balón durante buena parte
del partido, aunque por algunos minutos mostró un repentino
bajón en su rendimiento.
"En el primer tiempo le dije a (Nelson)
Haedo Valdez y a (Roque) Santa Cruz que si se animaban a
jugar más y a dividir menos el balón íbamos a acrecentar las
dudas de Eslovaquia", explicó el argentino Martino.
"Fue una buena victoria ante un equipo que
creó su situación más clara de gol a los 45 minutos del
segundo tiempo", agregó.
Mientras el volante paraguayo Enrique Vera,
figura del encuentro expresó:
"Dije antes del partido que si había un
triunfo era para todos los padres de Paraguay y para mi
padre en especial, se me dio el gol y fui a gritarlo a la
cámara para él".
En Paraguay es el Día del Padre este
domingo, al igual que en Sudáfrica y otros países. (REUTERS)