BEIJING.— Esta legendaria ciudad cerró ayer con broche de oro la XIII edición de los Juegos Paralímpicos, los mejores de la historia.

Tras 11 días de competencias, hombres y mujeres discapacitados ofrecieron una demostración de la fortaleza del espíritu humano y su búsqueda de una calidad de vida superior, aun cuando no les son ajenas sus propias limitaciones.

REGRESA OTRO GRUPO DE BEIJING Un segundo grupo de participantes en los Juegos Paralímpicos de Beijing arribó ayer a la Patria. A la terminal aérea acudieron a recibirlos José Ramón Fernández, vicepresidente del Consejo de Ministros y titular del Comité Olímpico Cubano; Lázara Mercedes López Acea, miembro del Secretariado del Comité Central, y Christian Jiménez, presidente del INDER. Fernández les transmitió a los deportistas un mensaje de reconocimiento del General de Ejército Raúl Castro, presidente de los consejos de Estado y de Ministros. (S.B.)

La máxima: "Nada en la vida es imposible", tuvo el toque mágico de la perseverancia, la fuerza, la inspiración y la celebración, los cuatro valores del atleta discapacitado que dejaron sentado que el deporte no es un medio de vida, sino necesidad imperiosa de reafirmarse como seres humanos.

En estos días en que he tenido la maravillosa experiencia de compartir con ellos, de verlos reír, llorar por una derrota, caerse a mitad de carrera o sencillamente vivir de una manera diferente, no puedo dejar de expresar la inmensa admiración que despiertan imponiéndose para retarse ellos mismos en pos de un triunfo deportivo.

Han sido los grandes protagonistas de esta epopeya que reunió a 148 naciones —récord de participación—, con 4 000 atletas de todos los continentes, cifras que los entendidos aseguran serán muy difíciles de superar en el 2012 en Londres, ciudad que en la noche de este miércoles se proclamó lista para la venidera XIV edición.

En la ceremonia de clausura, celebrada en el estadio nacional Nido de Pájaro, el impacto del colorido y de los temas escogidos para la representación artística motivaron más de una cerrada ovación de las casi 85 000 personas presentes, quienes desde horas tempranas hicieron largas colas para entrar a la instalación.

Hu Jintao, presidente de China, y Phill Craven, titular del Comité Paralímpico Internacional, presenciaron la jornada de clausura que contó además con la presencia de Li Qiu, presidente del Comité Organizador de los Juegos, quien agradeció a todas las personas, deportistas y voluntarios que hicieron posible este sueño compartido; y felicitó a los deportistas, que mostraron su espíritu de lucha durante los días de competencias.

Craven destacó que los juegos fueron los mejores de la historia y le dio las gracias a la sede por todo el trabajo desplegado para la buena marcha de la lid, donde se establecieron más de 750 récords entre mundiales y paralímpicos.

SUPERada la cosecha DE ATENAS

Nuestra Isla concurrió a esta cita con 31 atletas y un guía, la mayor delegación desde su estreno en Barcelona'92, para competir en cinco deportes: atletismo, pesas, tenis de mesa, judo y natación. Con cinco medallas de oro, tres de plata y seis de bronce, la Antilla mayor se ubicó en el lugar 23 para mejorar una veintena de plazas en relación con lo logrado en Atenas’04. Nuevamente el atletismo fue el motor impulsor de la comitiva al aportar más del 75% de las medallas alcanzadas.

Sus especialistas llegaron a esta ciudad con el deseo de superar la mejor actuación de toda la historia, la de Atlanta'96, cuando aportaron al medallero cubano las 8 doradas de esa paralimpiada. Ahora, de las 14 conquistadas 11 fueron a manos de los eventos del campo y la pista, con mención especial a los dorados Yunidis Castillo, con dos, en 100 y 200 metros; Leonardo Díaz, en impulsión del disco, y Luis M. Galano, en los 400.

También habría que destacar con letras mayúsculas al judoca Isao Cruz (81 kg), que ocho años después de coronarse en Sydney’00, esta vez volvió al lugar más importante del podio de premiaciones.

El doble ganador de plata Lázaro Raschid, en los 800 y 1 500, así como Freddy Durruthy, en 400, y los bronces de Gerdán Fonseca, bala; Luis Felipe Gutiérrez, 100 metros; Ettiám Calderón y Arián Iznaga, en el doble hectómetro, junto a los judocas Víctor Sánchez y Juan Carlos Cortada, completaron el lanzamiento antillano a la plaza 23.

Hay sangre muy joven en esta selección paralímpica que puede rendir frutos mayores en el venidero ciclo de cara a Londres 2012.

El tenis de mesa, y la natación igualmente tienen madera para subir a los planos estelares.

En la última fecha del evento, Diosmany González (clasificación T-12) ocupó el onceno lugar en la maratón, con tiempo de 2:39,55. El oro lo ganó Qi Shun (CHI) 2:30.32; seguido por Elkin Serna (COL) 2:31.16 e Ildar Pomykalov (RUS) 2:33.27.

Durante la ceremonia de clausura recibieron el premio Whang Youn Dai, concedido a deportistas que han sido ejemplo de superación, el atleta panameño Saíd Gómez, y la nadadora sudafricana Natalie Du Toit.

Con cinco participaciones en citas de este tipo —y dos oros en Atlanta’96— Gómez se quedó a las puertas de nuevas medallas, con el quinto puesto en los 1 500 m y el octavo en los 5 000, en la categoría T-13 (discapacidad visual parcial), en tanto Du Toit logró cinco títulos y compitió tanto en los Paralímpicos como en los Olímpicos.

CHINA OTRA VEZ CAMPEONA

La República Popular China, al mérito de haber ganado los Juegos Olímpicos, ahora suma el de liderar también en los Paralímpicos.

En esta oportunidad logró 211 preseas, repartidas en 89 de oro, 70 de plata y 52 de bronce, para superar en 42 títulos a Gran Bretaña, 102 (42-29-31) y 53 a Estados Unidos con 99 (36-35-28).

Otra vez Brasil, noveno lugar, 47 (16-14-17) y México, decimocuarto, 20 (10-3-7) se clasificaron como las naciones latinoamericanas mejores ubicadas en la lista final.