La Delegación Olímpica Cubana presente en este hermano país, al igual
que el resto de sus miembros, que se preparan en otros lugares para esta
cita estival, estamos al tanto de sus últimas Reflexiones, recibidas
como confirmación de su permanente atención al movimiento deportivo
cubano.
Le transmitimos que a solo días de comenzar los XXIX Juegos
Olímpicos, hemos sentido el sano orgullo de que Usted esté al tanto en
su mente y su corazón, de cómo nos estamos preparando para asumir el
reto de un buen desempeño, inspirados en su ejemplo y seguros de que
estará junto a nosotros en cada salida a los escenarios de competencias.
En medio de una acelerada adaptación al huso horario de esta parte del
mundo, sus mensajes han multiplicado la unidad, el sentido de compromiso
y el patriotismo que caracteriza a esta embajada atlética, heredera del
legado de lucha que genera tantas muestras de simpatía y aprecio en la
ahora anfitriona República Popular China.
Es un honor para nosotros
confirmarle que estamos dispuestos a regresar con el escudo y de ser
necesario sobre él, fieles al pueblo del que somos hijos y conscientes
de la alegría que podemos tributar a Usted, a Raúl, a cada uno de
nuestros compatriotas y a los hermanos Antonio, Fernando, Gerardo, Ramón
y René, que a pesar de permanecer injustamente prisioneros en cárceles
del imperio, sabemos estarán muy atentos a la actuación de cada uno de
nosotros, especialmente a la del equipo de béisbol que ahora tiene un
nuevo estímulo para lograr la victoria, nos referimos a la heroica
actuación de los juveniles participantes en el Mundial desarrollado en
Edmonton.
Competiremos con el mismo espíritu indoblegable que el
Ejército Mambí lo hizo en el 68 y en el 95, tradición de combate que
puso en alto el Ejército Rebelde en la guerra de liberación y que
mantienen y mantendrán nuestras invictas Fuerzas Armadas
Revolucionarias.
Con esa inspiración y ejemplo competiremos y
ganaremos las medallas de oro que nuestro pueblo y Ud. esperan.
Comandante; cuente con nuestra dignidad, entrega sin límites y
convicción de victoria. Gracias por su ejemplo.
Delegación Cubana.
6 de agosto