BEIJING.— Anoche, centenares de personas se disputaban apretujadamente un sitio a orillas de la céntrica avenida desde donde se divisan las espectaculares instalaciones del Parque Olímpico y, pese a la distancia, intentaban con los flashes de sus cámaras congelar imágenes que parecían de ciencia ficción.

El Cubo de Agua por dentro, una de las instalaciones más espectaculares.

Ubicado al norte de la ciudad, entre el cuarto y quinto anillos, en el Parque Olímpico de 66 hectáreas, está la mayoría de los recintos deportivos de los Juegos y uno, el ya célebre "Nido de Pájaro", es la insignia arquitectónica.

Ayer casi lo tocamos con la mano. La explanada que lo circunda también parecía galáctica: mientras caminábamos, juegos de luces se encendían a nuestros pies, porque señales fluorescentes alumbraban sin necesidad de la electricidad.

La impactante mole de hormigón y vigas de acero entrelazadas —42 000 toneladas se usaron— es como una gigantesca nave de otro planeta en movimiento. Dentro, en ese instante, varios miles ensayaban la ceremonia de apertura y a la salida, seguían guardando el secreto de lo que sucederá el 8 de agosto, a las 8 y 8 minutos de la noche.

El "Nido", que es el Estadio Olímpico con 258 000 metros cuadrados, será sede también de la clausura y el torneo de atletismo. Tendrá una capacidad de 80 000 plazas permanentes y 11 000 temporales durante los Juegos. A unos metros, el Centro Acuático Nacional, otra de las instalaciones emblemáticas que acogerá las competiciones de natación, saltos ornamentales y natación sincronizada, una de las "joyas" por su diseño futurista.

Conocido como el "Cubo de Agua", el paralelepípedo con paredes que asemejan burbujas, está formado por membranas de aire de un plástico denominado ETFE (etileno tetrafluoroetileno), que deja pasar la luz y, así, permite ahorrar hasta un 30% de energía y mantener más del 50% de la humedad.

Los automovilistas y transeúntes, entre estos miles de turistas, se impactan ante los cambios de colores de su estructura externa durante el día y la noche, de una y otra instalaciones.

Por ello no es de sorprender esa muchedumbre de curiosos a lo largo de la acera, cámara en mano, pese a la distancia del "Nido de Pájaro" y del "Cubo de Agua".

Además de estos dos superpesados, el Parque Olímpico, con una superficie total aproximada de 1 215 hectáreas, de las cuales 760 se han dedicado a zonas boscosas y áreas verdes, cuenta con la Villa olímpica y sus 200 edificios, el Gimnasio Nacional (gimnasia artística y balonmano), la Sala de Esgrima, El Estadio Nacional de Hockey sobre pasto, El Campo de Tiro con Arco: la Zona Verde, El Estadio Verde del tenis, el Centro Deportivo Olímpico con los gimnasios "gemelos" (para pentatlón moderno y polo acuático) y el Estadio Nacional .

Beijing será sede de 31 de los 37 escenarios de competencias; cinco figuran en otras ciudades (fútbol en Shangai, Tianjing, Shenyang y Qinhuangdao, y velas en Qingdao) y uno en la región especial de Hong Kong.

Algo se ha conocido de la ceremonia pese al "misterio" y, entre los rumores, trascendió que se encenderán aproximadamente 35 000 fuegos artificiales que durarán 20 minutos dentro del espectáculo. Y esa fue la razón de los estruendos que escuchamos en nuestro lecho llegados del Nido la madrugada pasada. Nada de truenos, ni rayos y centellas como creímos: los organizadores probaron el "cañón de bengalas", que harán sonar en la apertura.