Estaban presentes todos los integrantes de la delegación
de 165 miembros en esta sede de los XXIX Juegos Olímpicos, más las
glorias deportivas que la acompañan, encabezados por José Ramón
Fernández, vicepresidente del Consejo de Ministros y presidente del
Comité Olímpico Cubano; Christian Jiménez, titular del INDER y jefe de
la misión, así como por el embajador de Cuba en la República Popular
China, Carlos Miguel Pereira.
Resultó evidente el contraste de los vistosos uniformes,
con los colores azul, rojo y blanco de su bandera, así como la
diferencia numérica de la delegación de la Mayor de las Antillas con sus
compañeras en el acto, las de Paraguay, Aruba y Tuvalu.
Cheng Jian transmitió una calurosa bienvenida, en la que
deseó a las representaciones de los cuatro países los mayores éxitos en
la contienda deportiva y que se sintieran como en su propia casa.
Tras escucharse por su turno las notas de los himnos
nacionales, durante el protocolo del izaje de las enseñas patria, se
produjeron intercambios de presentes entre el Alcalde y los respectivos
jefes de delegaciones.
Los periodistas participantes en la cobertura del acto
pudieron aquilatar paralelamente la magnífica disposición, el buen
estado de ánimo y la confianza de nuestros deportistas en que competirán
al máximo posible de sus capacidades en busca de los triunfos que
mantendrán en alto a nuestra bandera y también contribuirán al regocijo
y a la satisfacción de todo el pueblo cubano pendiente de sus
actuaciones.
Judocas, púgiles, esgrimistas, remeros, especialistas
del tiro deportivo y del tiro con arco, así como las voleibolistas de
sala y de playa, que serán las primeras en entrar al fragor del combate,
este sábado, dijeron encontrarse no solamente listas, sino también
deseosas de que llegue el momento de la verdad.